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Los médicos se lo habían llevado urgentemente. Emilio no paraba de dar vueltas en la sala de espera mientras lloraba. Sus manos y nudillos estaban llenos de sangre. La gente que aguardaba en la sala lo miraban con curiosidad. No podía parar, no podía dejar de temblar ni de andar de un sitio para otro. Iba a volverse loco. Se agarró el pelo frustrado, cayendo en el primer asiento que estaba libre. Siguió llorando mientras movía con rapidez sus piernas. Su celular había vibrado varias veces, pero no le había prestado atención. Sólo quería que le diesen noticias de Joaquín. No le gustaba sentir eso. No le gustaba sentirse vacío, no de esa manera.

Una señora que tenía a su lado, colocó una mano sobre su rodilla intentando que se calmase.

- Debes calmarte hijo, vas a sufrir un ataque de ansiedad

- No puedo, no puedo - dijo cubriéndose el rostro mientras seguía llorando

- Respira - dijo la anciana acariciándole la cabeza

- Quiero matarlo, no puedo más. Siento tanta impotencia

- ¿Quieres contarme que ha pasado? He visto cómo ha llegado ese chico, ¿es tu hermano?

Emilio negó. No sabía que era de Joaquín. Ni siquiera lo sentía cómo un amigo. Él quería que fuese su novio, pero ahora no sabía muy bien que eran. Por lo que simplemente negó.

- ¿Un amigo? - negó de nuevo - ¿Tu novio?

Separó las manos de su rostro y se incorporó levemente dejando su cabeza caer. Asintió. La anciana sonrió acariciándole la espalda.

- Lo han violado - terminó diciendo - Su ex acaba de violarlo y no he podido evitarlo

Volvió a llorar. La señora no supo que decirle, sin embargo, no separó la mano de su espalda.

- Es mi culpa, por mi culpa lo ha violado

- No puedes culparte del comportamiento de un violador - dijo la señora aquella misma frase que otras tantas veces Emilio había repetido a Joaquín

- Si yo no hubiese aparecido en su vida, ésto no le habría pasado

- Si tú no hubieses aparecido en su vida, le habría pasado igualmente. Un violador no surge de la noche a la mañana

Emilio dejó de hablar, no quería saber nada. Sólo quería tener noticias de Joaquín tan pronto cómo fuese posible. Al cabo de un par de horas se tranquilizó un poco. La mujer le había proporcionado un botellín de agua y no lo rechazó. Leyó los mensajes de Roy y Adrián. La policía había llegado y se habían llevado esposado al imbécil. Al menos eso lo tranquilizó.

Agarró su celular de nuevo e hizo lo que necesitaba, llamó a su madre.

- ¿Emilio? - dijo somnolienta

Emilio miró el reloj de su celular, ya eran más de la 12 de la noche.

- Hola mamá - dijo llorando

- ¿Cariño, estás bien?

- No - dijo negando - No mamá, todo está mal

- ¿Qué ha pasado mi vida?

- Lo han violado mamá... - lloró más fuerte - Han violado a Joaquín

Apoyó su cabeza en la pared mientras al otro lado tampoco escuchaba nada. Emilio le había hablado a su madre varias veces sobre Joaquín y ella estaba feliz de que su hijo estuviese emocionado con alguien. Le daba igual que fuese hombre ó mujer, sólo quería ver a su hijo feliz. Pero eso no se lo esperaba para nada. Se quedó sin palabras, sentía impotencia y una necesidad urgente de llorar.

Heaven // Adaptación EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora