Isabella
Empaco mi maleta, llevo 3 bikinis y 5 pijamas diferentes, se que máximo use 2, pero mujer precavida vale por dos.
Natalia chatea recostada en mi cama mientras Austin lee escucha música recostado en su espalda.
Son novios.
Desde niños, a los 12 años comenzaron su noviazgo, no han parado, el es un primo más.
— No se que mas llevar — digo frustrada pasando las manos por mi cara.
— Dime que empacaste — dice el rubio.
— 3 trajes de baños, 5 pijamas, ipad, teléfono, cargador, dinero, ropa interior, bloqueador solar, maquillaje, 2 pares de zapatos, implementó de aseo y listo. — me siento en la cama.
— ¿Tu que opinas Lia? — le pregunta a mi prima.
— ¿Llevaste la ropa elegante? — niego con la cabeza ¡mierda!
Voy a mi armario y busco un conjunto blanco juntos con mis tacones de punta.
Los meto en un bolso para que no se arruguen y los pongo dentro del equipaje. Termino de cerrar el equipaje para ira buscar algo de comer, antes de terminar de bajar las escaleras, escucho voces.
Es una chica y Aiden, los escucho hablando.
— ¿Si puedo ir? — su voz me hace fruncir el ceño
— No. — el puntualiza.
— Ay amorcito, dejame ir, quiero conocer mas a tu familia.
¿Desde cuando deje que le diga amorcito?
— Lexie, por favor no me digas asi — pide el calmado.
Ese es mi Aiden.
No es tuyo, ademas no deberias estar aqui de cotilla.
Silencio.
— ¿Cuando pensaras en presentarme a tu familia? — mi enojo crece.
— No necesitas conocerla para que sigamos acostandonos.
Abro mi boca en una "O"
— Quiero conocerla, porque para mi no eres un acoston — suena algo parecido un beso.
Hago una mueca de asco.
— Es algo familiar e intimo, mi madre dijo que solo familia.
— Bien, ire a convencerla de que me deje ir — escucho pasos.
Subo a toda carrera las escaleras y me meto en mi cuarto. Natalia y Austin me miran raro.
— ¿Que pasa? — pregunta el.
— Olvide mi cargador. — miento.
Natalia me mira con sospecha.
— Ni siquiera llevaste tu telefono — dice escudriñandome.
— ¡Exactamente! Me acorde de que debia cargarlo, ¡que distraida! — digo golpeando mi frente con la mano.
Ellos me miran con desconfianza.
— Bueno, vuelvo abajo — salgo del cuarto.
Me encuentro a la tal Lexie tocando el cuarto de mi tia. Aiden se toma el pelo.
Ella voltea a verme y frunce el ceño.
— ¿Que me ves? — habla golpeado.
— ¿Que me ves tu? — contraataco.
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En el odio de sus ojos
RomanceAiden y Isabella son primos que se odian desde siempre, si algun sentimiento bueno habia entre ellos, ya no lo existia, despues de separarse cuando apenas tenian la edad de quince años, vuelven a reecontrarse, no es un encuentro agradable, tienen al...