Just a kiss [Dreamnotfound]

7

Dream quería ir a disculparse aunque no había sido su intención decirle tales palabras a George, pero era demasiado tarde. Su madre lo esperaba afuera y George ya se había ido.

Obviamente le contó todo a Karl porque era uno de sus mejores amigos y siempre le daba los mejores consejos, pero esta vez fue distinto. Se mostró indiferente y solo dijo "Ya se le pasará".

Él no estaba seguro que eso fuera cierta. Seguro ahora George lo odiaba, lo había tachado en su lista negra y se había encargado de borrarlo por todos lados.

—¿Salimos el viernes? —le preguntó Karl mientras escribía muy concentrado por su teléfono.

—¿Solo los dos?

—Con Sapnap también.

—¿No prefieren salir ustedes dos solos?

—No.

En verdad sí lo preferían, al menos Karl, pero había una razón por la que Dream debía estar con ellos.

...

El viernes por la tarde, Dream y Karl estaban en el centro comercial supuestamente buscando algo que Karl quería comprar en cuanto esperaban a Sapnap.

—¿Pero qué es lo que quieres? —le preguntó Dream cansado de ir tienda por tienda a comprar nada.

—No sé.

—¿De verdad querías comprar algo en específico o solo quieres algo en que gastar tu dinero?

—Es complicado.

—¡Solo dime si sabes lo que quieres comprar o no!

—Espera un momento, Dream. Sapnap me está llamando.

Karl contestó la llamada y salió de la tienda. Dream lo siguió encontrándose con Sapnap corriendo hacia ellos y no estaba solo, George iba junto a él.

—¿Qué haces aquí? —le preguntó Dream a George, y quiso morderse la lengua al haber sido tan directo.

—Si quieres puedo irme.

—No, no. No es eso. Solo no sabía que ibas a venir.

—Muy bien. Después hablan —les dijo Karl metiéndose en su conversación—. Ahora ayúdenme a buscar lo que estoy buscando, ¿sí? —Karl le guiño un ojo a Sapnap.

—¿Qué debemos buscar? —preguntó George.

—La cosa que estoy buscando. Solo caminen y si lo encuentran me avisan.

—Pero...

—Nada de peros. ¡Caminen!

Los cuatro empezaron a andar a quien sabe donde. Karl y Sapnap estaban felices hablando y riéndose juntos como siempre. Por otro lado, George y Dream no parecían muy agusto con al compañía del otro.

En una tienda que estaba repleta de gente perdieron a Karl y a Sapnap. Los intentaron buscar cada uno por su lado, pero solo volvieron a encontrarse entre ellos dos.

—No creo que los encontremos aquí dentro. Mejor hay que esperarlos afuera —le dijo Dream y George solo asintió con la cabeza.

Se quedaron sentados en unas bancas del centro comercial esperando a que los otros dos aparezcan. Hubo un buen rato de silencio donde ni se atrevían a mirarse. Parecían completos desconocidos.