Capítulo 11

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Siente demasiados nervios dentro de ella, se imagina descalza, pisando fuerte el suelo de madera que se deslizara bajo sus pies descalzos, sonríe de nuevo, mira al cielo, que azul tan bonito. Se queda mirándolo bastante rato, con los pájaros piando. Se ha imaginado tantas veces bailando, que esta deseando ir a la escuela para demostrarle a su nueva profesora Helen. Corre impaciente por la acera, la gente se queja cada dos por tres por que la joven empuja sin quererlo.

-¡¡Mira por dónde vas!!.-Grita un hombre bastante aburrido de su vida y que por eso es desagradable con todo el ser humano. La chica se gira culpable de su empujón accidentado, y sigue corriendo con esa misma alegría que tenía desde el principio. Corre tan deprisa que el aire que sobresale en sus labios sale disparado. No le importa, en ese mismo instante no le importa cansarse. Su meta está muy próxima a esa puerta, que le indicara por dónde comenzar su triunfo. Se acerca más a la puerta, tira aire por la boca y sonríe emocionada.

Toca la puerta, y Helen con una gran sonrisa, coge el pomo de la puerta y la gira sin dejar de mirar a la joven muchacha. Al fin le abre y el corazón de Juliet empieza ha palpitar de los nervios. Se siente insegura.

-Hola...

-Hola, me como ya sabrás mi nombre es Helen, encantada.- La profesora le da la mano y está se la estrecha. Se sueltan de las manos y después se abrazan con una gran sonrisa en sus respectivos labios.

-Ven entremos a la clase, te voy ha presentar a tus nuevos compañeros.- La profesora la lleva a la clase donde allí estaban sus alumnos, entre ellos, su mejor amiga y el chico que conoció el otro día pero que no sabía como se llamaba. Luca la mira y sonríe cogido de la barra.

-Luca, venga hazme la primera posición.- El chico deja de mirar a la chica nueva, y hace caso a la profesora. Se separa de la barra, se concentra, y su rostro pasa de la felicidad a la seriedad y la concentración. Dobla los brazos y los pone en posición de jarra, después junta las yemas de los dedos, que se forman como un pequeño triángulo.

-Muy bien luca, me gusta como estás trabajando tu rostro, y tu cuerpo como esta bien alienado.-La mujer se separa de él y le aplaude, esté sonríe tímidamente con la mirada cabizbaja y apoyado nuevamente en las barras. Ya le toca a la nueva, Helen pensó en hacerle una pequeña prueba el mismo día que iba ha empezar ha darle clases de ballet.-Haber Juliet, haz lo mismo que acaba de hacer Luca, tu nuevo compañero.-Helen cambia de carácter cuando esta dentro de su clase y se pone ha hacer los papeles de gran bailarina y profesora al mismo tiempo.-Venga, demuéstramelo, Helena me comentó que sabías bailar muy bien, a si que quiero que me lo demuestres.

La joven hace lo que Helen le ordena, y la mujer queda maravillada por la seguridad que muestra su rostro cuando empieza ha ponerse en posición para bailar, sabe perfectamente que le tiene que enseñar bastante a esa joven con la sonrisa dulce.

-Muy bien Juliet, bien, como ya os comente la semana pasada, esta chica.-Dice tocándole el hombro como muestra de cariño y mirándola con una sonrisa.-Gira la cabeza para mirar a sus alumnos de frente.-Venga, presentaos.- Yo me llamo Luca.-Dice el chico mirándola con timidez, recuerda el momento en el que la vio, no la conoce, pero le alegra mucho tenerla en la escuela de ballet.

-Yo me llamo Greasen , ¡encantada!.-Los demás no se quisieron presentar, pero ya lo harán, Juliet sonríe, y saluda con amabilidad a sus compañeros.

-¡Bienvenida!-Gritan todos con una gran sonrisa en sus respectivos labios. Chicos y chicas aplauden con mucho entusiasmo a la nueva bailarina de de la escuela de baile Helen grusen.



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