Tengo un gato que no murió de curiosidad. Era negro y lo mataron de angustia.
Tenía los ojos grises y le maullaba a la luna cuando estaba partida por la mitad.
Al final las ratas se lo comieron a él.
Tengo un gato
Tengo un gato que no murió de curiosidad. Era negro y lo mataron de angustia.
Tenía los ojos grises y le maullaba a la luna cuando estaba partida por la mitad.
Al final las ratas se lo comieron a él.