Debe ser que te gusta gastar el tiempo negándote a reconocer que esto hace tiempo que acabó.
Pensé que quedaría más claro si me despedía en un nuevo mensaje de ti pero parece que no bastó.
Parece que te niegas a crear nuevos mundos con otras personas, a clavar tus pupilas en otras diferentes a las mías, que te niegas a deshacer más camas que no sea la nuestra, pero ya cesó lo que fuera aquello.
Ya fue.
Llevaba un tiempo roto e intentamos arreglarlo. Ya lo sé. Ya sé que hiciste cuanto pudiste pero no hay remedio cuando faltan piezas.
Entiéndelo, no falló porque las cosas no cuadraran, sino porque yo fingí que estaban todas las partes de la historia cuando lo que en realidad hacía era esconderlas para que nunca acabase, ni empezara.
Debe ser que no te quiero aunque te dije mil veces que sí.
