La Luz De Tus Ojos (Saga Tu Luz # 1)

Capítulo: 9

Jazmín.

Últimamente las cosas entre la manada Reina han estado muy tensas y peligrosas para todo el mundo.

Hace dos días hubo otro ataque de Rogué, en esos momentos yo andaba paseando por el pueblo junto con Jared que me invitó a comprar unas cosas que le mandó su pareja a comprar para el departamento.

Porque sí, ellos se iban a mudar a vivir juntos. Y necesitan tener cosas indispensables.

Ya teníamos varios utensilios cuando de la nada unos lobos sin manadas nos atacan, y empieza a reinar el terror.

Jared me tomó de la mano para echar a correr pero al parecer un par de lobos nos acorralan.

Mi amigo se transforma para pelear. Yo me acurruco en una esquina oyendo gruñidos, golpazos, y chillidos de dolor.

Me preocupa Jared porque él es solo un Omega, y lo pueden matar.

Dios mío, ¿que hago?

Odio ser ciega y no poder hacer nada para ayudar.

Lloro de miedo abrazando mis piernas deseando que mi Rey aparezca para salvarnos...

Y sí, gracias a la Diosa Luna apareció James quién es un Lobo Guerrero y acabó con esos forasteros.

Todo quedó en silencio. Y yo me levanto asustada.

__Jared por Dios dime ¿estás bien? ¿Alguien anda ahí?

__Hablo temerosa. Doy un grito cuando siento una mano en mi brazo para darle de golpes.

__¡Auchuth! Yaa Jazmín soy yo Jared... Tranquila, estoy bien. Estamos bien, gracias a James.

__Aclara el Omega ansioso abrazando a la Morena que se aferra a su pecho.

__Chicos es hora de irnos antes de que vengas más Rogué.

__Avisa James directo. Para irnos rápidamente.

El Rey Alfa y los guerreros lograron neutralizar a los invasores y desde ese momento se dió un toque de queda.

Así que a las seis de la tarde todos debemos estar en nuestras casas por tiempo indefinido.

Aún así mis encuentros con Blake no han parado. Sino es en la cascada, otros en el centro del bosque, pero siempre nos vemos que es lo importante.

Me hallo en mi habitación aún en mi pijama que consiste en un shorts corto blanco y una blusa de tiras de igual color.

Mi largo cabello rizado color chocolate cae suelto en mi espalda, y mientras escucho música desde mis auriculares.

Sé que la casa está sola porque todos están en el campo de entrenamiento, todos deben dar todo de sí en los entrenamientos para cuidar a la manada.

Por eso estoy sola encerrada en mi cuarto matando el tiempo oyendo música. Mi pie se mueve al ritmo de la tonada.

Para dar un grito aterrado al sentir que alguien me toma de la nuca y me besa.

Asustada le doy un mordisco tan duro que le saco sangre. Oigo que el tipo se queja maldiciendo.

Y ahí noto ese magnífico olor a madera, almizcle y tierra mojada que me encanta que pertenece a mi Rey Alfa.

__Ooh santo Dios lo siento mucho...¿Te hice daño?

__Digo alarmada. Levantándome de la cama guiando me por el olor hasta sentarme en el suelo.

__Descuida cariño...Me lo merezco, no debí tomarte por sorpresa. Por otro lado me alegra saber que te puedes defender.