Cuentos de una mente rota

Decisión Anticipada.

-¿Cuántas veces tengo que repetirlo? Aquél es sólo mi amigo.

-Repítelo todas las veces, hasta que te lo hayas creído.

-Sólo amo tus detalles, tu voz, tu cara... ¿Acaso mi virginidad no dice nada?

-Sólo eso compartiste conmigo, porque tu corazón ya tiene dueño fijo.

-Aquél cruel...

Que con una amistad se fue...

No puede nada merecer.

-Daño te hizo, se quedo con un sentido, tu sentido para amar el cual yo no lo logro recuperar.

-Tantos caminos que pude tomar y en ese repugnante pude terminar...

-Aunque lo niegues,

El destino de tu elección fue ese quiebre,

Ahora vives en una parajoda tetricamente...

En un parque con alumnos reprimidos, una flor y un mentiroso platicaban sobre que "hubiera sido", sobre un hombre con caminos definidos.

Volar y caer no hubieran sucedido.