Diario de una luchadora

Despertar

Me desperté en sus brazos cuando los primeros rayos de sol despuntaban. Se me había olvidado echar la cortina con todo lo que pasó anoche. Le desperté:

- ¡Buenos días!- mientras se desperezaba, abrió los ojos que sin gafas eran especialmente de un azul precioso.

- Buenos días- me contestó risueño con una sonrisa aún perdida en su último sueño.

Me comí una galleta oreo, mientras Simon tomaba cereales, ambos estábamos encantados. Nos necesitábamos y nos íbamos a separar y aunque todo se supone que "seguiría igual" todo iba a cambiar en cuestión de días. Terminamos nuestro desayuno y Simon me dijo:

- ¿Qué hora es? - miré el reloj de la cocina que estaba justo detrás de él y le dije :

- Son las 11.00 las 10:00 en Canarias.- seguí comiendo tan tranquila y de repente...

- ¡¿Tan tarde?!- se levantó muy deprisa medio atragantándose con los cereales.

- ¿Qué pasa?

- Me tengo que ir

-¿Cuál es la razón por la cual Simon ha de marcharse?- bromeé.

- Jajaja. Tengo que ayudar a mi madre con la mudanza y todo, hoy llevamos los muebles a la casa de Galicia.

-¿Entonces... te vas ahora a Galicia...?

-Sí, pero volveré para despedirme como es debido, el jueves vuelvo.

-Pues, entonces hasta el jueves... -dije mientras le acompañaba a la puerta. Le abracé muy fuerte y le sonreí para que se llevara un bonito recuerdo de mi a Galicia. Mientras él se alejaba por el pasillo yo le miraba con mi mejor sonrisa, cuando ya desapareció, cerré la puerta, me apoyé en ella, hasta acabar sentada en el suelo llorando. Las lágrimas llenaban mis ojos cargadas de dolor y soledad. No sabía como iba a soportar estar tan sola, tan sin él... De repente'te me vibró el móvil :

" Ya te echo de menos :D"

Mientras miraba la pantalla me salió una pequeña sonrisa con lágrimas en los ojos.

"Yo también <3"

De momento, en la barra de notificaciones salió un mensaje de Fernando, lo abrí :

" Hola Inés, ¿me podrías ayudar con Filosofía?"

Pensé para mí que cómo podía tener alguien tanta cara, pero decidí que quizás era bueno irme un rato para olvidarme por unas horas del dolor que me provocaba Simon y su partida.

"Sí,... supongo. ¿A qué hora?"

" ¿A las 17.30h en mi casa? "

" Vale :/"

Me cambié porque aún seguía en pijama, un pijama rosa de ositos que solo tenía confianza de enseñárselo a Simon.

Con mis pantalones vaqueros, una camiseta rosa fluorescente con encaje en la parte de las clavículas y una chaqueta de punto granate, me encaminé hacia casa de Fernando. Metí en mi bandolera marrón el libro de Filosofía. Se suponía que íbamos a estudiar... Llamé a la puerta "ring" , se abrió al segundo:

- Hola Inés, pasa, pasa.

- Hola Fernando.

Entramos en su habitación, una habitación con literas para él y para su hermano, un año menor.

- Siéntate aquí - me señaló una silla de color cerezo. La mesa de estudio de Fernando, la compartía con su hermano. La parte de su hermano tenía un mural con unos dibujos un tanto extraños y una cajita marrón con detalles en negro en una de las esquinas. Su parte sin embargo tenía un dibujo de "Have a nice day" y la postal que le traje de aquel viaje de fin de curso,... "¡Espera!"- pensé, "¿La conserva?".- Emmm... ¿empezamos?- me preguntó cuando se percató de que estaba analizando cada parte de la habitación.