El otro lado. (Volkacio AU).

Capítulo 13

Me tumbó en la cama repartiéndome besos aleatorios; en la mejilla, en la mandíbula, los labios...

- ¿Estás mejor? - Susurró dándome otro beso en los labios, le miré la cara, estudiandosela.

¿Cómo puede una persona crear tanta guerra en la cabeza de uno?

¿Estoy haciendo bien en esto? ¿Esto sigue siendo porque necesito información? Si se enterara mi padre, ¿que diría?

- No puedo hacer esto, Viktor. - Murmuré sentandome en la cama sin mirarle. Se quedó sentado en la cama.

- ¿Qué pasó? Estábamos bien, ¿no?

- ¿No entiendes? Hace un mes no nos podíamos ver la cara, y hoy nos vamos a acostar el uno con el otro. No sé que pensar ya. ¿Nos odiamos? ¿No quieres venganza?

- Horacio... - Susurró, no le miré, seguí mirando la pared.

- No estoy pensando.. no estoy pensando con lógica yo.. - Susurré escondiendo mi cara en mis manos frotándome los ojos para encontrar la calma.

- No siempre tienes que tener todo bajo control-.

- No lo entiendes, no lo entiendes.. no.. - Negué con la cabeza suspirando.

- Ya te he dicho, que referente a Blake, cuando te vea en uniforme te destrozo, pero ahora mismo es que no soy federal, soy Viktor. - Dijo en un tono de voz suave.

- Me estás manipulando. - Murmuré ahora dándome la vuelta para encontrarme con su mirada.

- ¿Y si te estoy manipulando que? ¿No es mejor pensar que tienes a alguien aqui para ti? ¿Tan difícil es verlo que a alguien si le importas? - Dijo cogiéndome de las manos. - Entiendo la desconfianza.

- ¿Y si cojo un cuchillo y te lo clavo?

- Ya te he dicho, que prefiero vivir feliz a morir solo. - Dijo en un susurro, como si fuera un secreto.

- Si vamos a hacer esto, necesito que te apartes de mi caso. - Susurré cruzandome los brazos.

- No puedo hacer eso. - Negó con la cabeza. - Cámbiate de banda, vente con nosotros y castigamos a tu padre.. por todo lo que ha hecho.

- ¿Qué es lo que ha hecho en tus ojos que hace que tanto lo quieras atrapar?

Se quedó callado un momento, como si le frenará algo contestarme, pero tomó una respiración profunda y me miró directamente a los ojos.

- Apartarte de mi. - Me dijo, y sé que me decía la verdad. Esta vez no me manipulaba.

- Deja el caso del lado.. - Susurré, ya casi suplicando, negó con la cabeza.

- Tengo que hacerlo, me lo debo a mi mismo. Y a ti Horacio. No sabes el daño que te está haciendo estar con ese- - Le entrecorté.

- No sé donde está.

- No soy imbécil.

Me quedé callado mirando el suelo de la habitación.

Quiero sentir algo, y mi padre me la ha jugado sucio, ¿me importa lo que piensa ese viejo?

Me di la media vuelta sentandome más en la cama, mi cuerpo girado hacia el.

- ¿Por qué te interesa esto? ¿Qué ganas con esto?

- Hace tiempo.. que ya no.. te deseo y ya. - Susurró haciendo que afirmara con la cabeza, me incliné hacia el dándole un suave beso en los labios.

La situación no tardó nada en calentarse, estando yo encima de él, acariciandole los costados suavemente mientras nuestras lenguas jugaban al juego que tanto conocían entre ellas.