Myosotis

Cap 14

De la nada la mamá de Alba se giró encontrándose conmigo, en definitiva me había atrapado viendoles y a pesar de eso ninguno de los dos rompió el contacto visual, no era incómodo de hecho, no sé que veía ella pero a mi me interesaron fue esos ojos, así que era de su madre de quién los había heredado.

La mamá de Alba tenía el mismo corte que ella y lucía un elegante vestido color amarillo, era mucho más delgada que su hija debo mencionar así que no sé de quién habrá sacado esas enormes piernas, de hecho también parecía ser una mujer muy joven, era eso o se conservaba muy bien.

No le calcularía más de 40.

Como sea, fue ella quien apartó los ojos antes que yo para volver hablar con su familia, como consecuencia volví a ver a su hija que era aún sorprendente que no hubiera notado mi presencia.

Se me hubiera hecho muy gracioso que en lugar de su madre, me fuera topado con los ojos de su hija.

Te ves tan bonita pero... Te ves mejor sin nada.

Sonreí inconscientemente pero eso no me duró mucho porque mi madre me dirigiría la palabra haciéndome bajar de mis pensamientos de forma tan abrupta.

Recobré la compostura - ¿Dijiste algo?.

- ¿Conoces a esa familia? - Preguntó mi madre sin despegar sus rojos labios de la copa de vino.

Reconozco que me dió bastante vergüenza que lo fueran notado.

- Su hija es una compañera de clases.

Di un profundo trago a mi copa no queriendo que mis padres indagaran más en el tema pero mis palabras solo despertaron aún más su intriga por la familia de la señorita, ambos se giraron y los observaron en silencio por un rato como si fuera el programa más interesante de momento y sinceramente yo tampoco pude contenerme a ver hacia allá otro par de veces.

¿Que más podía hacer?, Tenía muchas ganas de ver la cara que Alba pondría al verme.

- No parece ser tú tipo.

Justo estaba tomando de mi copa y me he atorado por puro escuchar lo que ha dicho mí mamá, ¿Cómo carajo sabe cuál es mi tipo?.

- No, no lo es - Evite verlos con evidente vergüenza.

Jeins, mi padre... Se empezaría a reír de la nada y claro que era de mí, hasta que bueno le he fulminado con la mirada que ya decidido parar.

Jeins vio hacia la mesa de la señorita enigmática con mucho más interés - Debe ser una chica especial para que te le quedes viendo así.

Supongo que esa es una buena forma de describirla, "Chica especial" pero eso no quita el hecho de que lo estén malinterpretando.

No dije nada.

Creo que se sorprenderían si les contará que esa chica me ha estado acosando por años, eso sería muy divertido de ver, talvez así dejan de molestarme.

- Solo es una compañera - Les aclaré.

Con la que me estado involucrando... más de lo que debería.

- Parece ser una chica bastante interesante.

Ok, mi papá tenía muy buen ojo.

Sonreí coincidiendo por primera vez en algo con mi padre - Lo es.

Mamá no hacía más que verles, escuchando nuestras platicas en silencio.

Y de un instante a otro la madre de Alba se levantó de su asiento, provocando que tanto mi padre como yo nos alarmaramos y nos giramos para no encontrarnosla.