𝑆𝑜𝑚𝑒𝑟𝑠𝑒𝑡 𝐻𝑜𝑢𝑠𝑒
Por primera vez desde el comienzo de la temporada, Diana podía decir que se había preparado con ganas para asistir a un evento social. Cuando la joven Bridgerton escuchó que la apertura de una nueva ala en Somerset House tendría lugar esa misma semana y que toda la alta sociedad estaba invitada al evento, Diana no encontró otro tema de conversación para compartir con sus hermanos.
Y la joven estaba agradecida de haber encontrado una distracción que le alejara de lo sucedido en Danbury House hacía unos días. Diana había llegado a pensar que, si le daba más vueltas al asunto del conde, perdería la poca cordura que le quedaba.
Mientras Violet Bridgerton aprovechaba la ocasión para recomendarle a su primogénito las debutantes más adecuadas para convertirse en la próxima vizcondesa de la familia, Diana y Hyacinth se adentraron en la galería. La pequeña no era una apasionada de la pintura como sus hermanos mayores, pero el compartir un rato en sociedad con Diana, a quien admiraba profundamente, le hizo sentir como si ella también fuera una debutante.
—¡Mira, Diana! Parece que están en movimiento.
La rubia rió con ternura al ver el entusiasmo de Hyacinth. Su hermana pequeña tiraba de su mano cada vez que una obra de arte llamaba su atención, arrastrándola por la sala y animándola a que le explicara el significado de la pintura o escultura que tuvieran ante ellas.
—Sí, eso parece. Es una figura realmente maravillosa, ¿verdad?
—Parece que están enamorados —dijo la pequeña—. ¿Tú qué crees, hermana?
Diana analizó la escultura con atención, observando los cuerpos entrelazados de la pareja de mármol blanco. Ciertamente, a la joven también le parecía encantadora la escena; dos jóvenes que parecían abrazarse después de estar separados, como si las ganas por tocarse fueran superiores a su razón.
—¡Oh, mira ese! Iré a buscar a Benedict para que nos acompañe.
—¡Hyacinth!
La llamad de la rubia no alcanzó los oídos de Hyacinth, que salió corriendo entre los grupos de asistentes para buscar a su hermano mayor. Diana suspiró y se volvió hacia la escultura, esperando encontrar a algún miembro de su familia antes de que alguien entablara conversación con ella.
Pero una vez más, la suerte no estaría de su lado.
—Miss Bridgerton, se ha convertido en toda una señorita.
—Lord Ingleby —saludó la joven—. Es un placer ver que se une a la temporada. ¿Qué tal su viaje por Escocia?
Los Ingleby y los Bridgerton habían sido familias muy cercanas desde los tiempos de los abuelos de Diana. Los hijos mellizos de Lord y Lady Ingleby habían ido a la universidad con Colin y ahora estaban viviendo en Escocia, donde habían comenzado un exitoso negocio con una empresa industrial extranjera. Lord Ingleby y su esposa habían pasado dos años viviendo allí con uno de sus hijos tras el nacimiento de su primer nieto.
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𝐈𝐟 𝐈 𝐦𝐚𝐲, 𝐌𝐢𝐬𝐬 𝐁𝐫𝐢𝐝𝐠𝐞𝐫𝐭𝐨𝐧 | 𝐫𝐞𝐠𝐞𝐧𝐜𝐲 𝐞𝐫𝐚
Romance𝐷𝑖𝑎𝑛𝑎 𝐵𝑟𝑖𝑑𝑔𝑒𝑟𝑡𝑜𝑛 𝑠𝑒 𝑑𝑖𝑠𝑝𝑜𝑛𝑒 𝑎 𝑟𝑒𝑎𝑙𝑖𝑧𝑎𝑟 𝑠𝑢 𝑝𝑟𝑒𝑠𝑒𝑛𝑡𝑎𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑒𝑛 𝑠𝑜𝑐𝑖𝑒𝑑𝑎𝑑 𝑗𝑢𝑛𝑡𝑜 𝑎 𝑠𝑢 𝑚𝑒𝑙𝑙𝑖𝑧𝑎, 𝐷𝑎𝑝ℎ𝑛𝑒. 𝑃𝑎𝑟𝑎 𝑒𝑛𝑡𝑜𝑛𝑐𝑒𝑠, 𝑙𝑎 𝑙𝑙𝑒𝑔𝑎𝑑𝑎 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝑑𝑢𝑞𝑢𝑒𝑠 𝑑𝑒...