Dedicado a: pati112307
Contenido maduro:
La nueva temporada de debutantes ha comenzado y sin duda este año será muy interesante para el vizconde Anthony Bridgerton y es que se ha propuesto desposarse con la joven que había comenzado a dominar sus pensamientos, además de sus corazón y no era que la primogénita de la condesa de Richmond, Amelia.
Los dos se conocían desde que eran pequeños y nunca paraban de pelearse y a pesar de que el primogénito de los Bridgerton se había prometido a sí mismo el no desposarse con aquella joven, poco a poco se fue dando cuenta de que en sí misma la joven era todo un desafío, pues él se veía perfectamente capacitado para domar aquel carácter indomable en el dormitorio.
Cuanto más tiempo pasaba, más se imaginaba a Amelia convertida en su esclava sexual y en la madre de sus futuros herederos, ya que tenía pensado tener muchos y es que una noche soñó con la chica con el pelo suelto, desnuda de cintura para arriba, arrodillada y con las manos atadas por uno de los pañuelos del vizconde y aunque en su rostro se mostraba un odio puro hacia él, sus ojos por el contrario decían "poséeme".
Al despertarse, Anthony decidió desfogarse con su mano sin dejar de pensar en Amelia, además de prometerse que sería el mejor pretendiente de todos.
Al principio, cuando su madre, la viuda Bridgerton se enteró de las intenciones de su primogénito, no pudo evitar preocuparse, pues ella sabía lo competitivo que podía llegar a ser Anthony y no quería que ni Amelia ni él resultaran heridos por culpa del orgulo del joven, pero cuando se percató de cómo su hijo miraba a la chica acabó por tranquilizarse, ya que así era el modo en el que su difunto marido la miraba.
Pasaron varias semanas hasta que Anthony le pidió matrimonio a Amelia y aunque ella no le amaba y estaba convencida de que el vizconde estaba tramando algo contra ella, Amelia se vio obligada a casarse con él por orden de su madre.
Tras la boda, los recién casados se dirigieron a su nuevo hogar, Aubrey Hall y en cuanto ambos entraron en el dormitorio, Amelia le encaró a su marido diciéndole que haría de su vida un auténtico infierno empezando por buscarse un amante.
Pero nada más decirle eso, Anthony la agarró con fuerza para estrecharla junto a él y comenzar a besarla con fuerza y desesperación para acabar consumiendo su noche de bodas durante varias horas hasta el amanecer.