Desde hacía varios años, Theodore Laurence, también conocido como Laurie, sabía que su destino era casarse con una de las hermanas March, pero lo curioso es que Amy, no fue la elegida, sino Kate, la segunda hermana de la familia March.
Kate, al igual que el resto de sus hermanas tenía un talento y el suyo era la inteligencia.
Desde que era pequeña, siempre había tenido mucha curiosidad por las cosas y cuando tuvo la edad suficiente para aprender a leer, comenzó a investigar sobre los libros de ciencias, los cuales la llevaron hasta su mayor sueño que era convertirse en médico.
Kate no era una chica presumida, ni rebelde, ni tímida, sino más bien callada, pues a pesar de querer mucho a sus hermanas, ella prefería pasarse las horas investigando cualquier cosa y no decir nunca lo que pensaba, lo que la convertía en una chica misteriosa.
Unos años después de terminar la guerra, Kate se armó de valor y comunicarles a su familia lo mucho que deseaba convertirse en médico y aunque sus padres aprobaban aquel sueño, su tía March no lo aprobaba, ya que para ella, lo único que debía hacer una señorita de su clase era casarse con un hombre rico, algo que ella no deseaba y cuando el médico de Concord, quien ya conocía a la familia March, se enteró de lo mucho que deseaba Kate convertirse en médico, decidió hacer todo lo posible por ayudar a la joven.
Pasaron los días cuando Kate recibió una carta de la universidad de Harvard aceptando su solicitud de ingreso y tras darle las gracias al doctor y de darles la noticia a su familia, estos no pudieron evitar ponerse un poco tristes, pero en el fondo sabían que Kate estaba ansiosa por seguir su propio camino.
Al principio su estancia no fue fácil, ya que al ser la única mujer en toda la universidad, sus compañeros no paraban de burlarse de ella y sus profesores siempre la hacían de menos, pero Kate quien era una joven que no se dejaba vencer fácilmente, siguió estudiando y aprendiendo mucho hasta que logró hacerse un hueco entre sus compañeros, además de tener la suerte de que Laurie estudiara Derecho en la facultad de al lado.
Poco a poco, Laurie cayó cauitivado ante Kate y aunque ya había entregado su corazón a Jo, no pudo evitar darse cuenta de lo especial que era Kate y no sólo por su inteligencia, sino porque durante sus horas libres, ella prefería ir al hospital a curar a algunos de los pacientes y pasar el tiempo con los niños, quienes le tenían mucha confianza porque era muy cariñosa.
Lo malo era que, cuando Laurie quería pasar tiempo con Kate, siempre había algún compañero que deseaba salir con ella, sobre todo algunos jóvenes que tenían la mente abierta y pensaban que las mujeres debían hacer algo más que casarse y tener hijos y es que aunque Kate no lo supiera, ella estaba empezando a cambiar el mundo.