Narradora (yo xd)
En otra parte de Estados Unidos...
Seattle, una ciudad fría pero a la vez cálida, muelles hermosos en donde puedes pasear en bote, caminar por los bosques cerca de la misma.
Un poco cerca de este lugar, se encontraba un chico sentado en la orilla de ese muelle.
-Aidan- gritó un hombre alto tez blanca con anteojos.
-déjame tomar una foto más y ya- sacó su cámara y tomó la dicha foto.
Se levantó del muelle y caminó hasta el señor.
-vámonos, tu madre ya debe tener la cena lista- sonrió el chico y subieron a un auto.
-papá- habló el chico- mañana saldrán los chicos a cenar, y quiero ver si puedo salir con ellos- parecía nervioso aquel chico con cabellera castaña.
-claro hijo, solo cuídate- miró al chico y asintió mientras sonreía y dejaba ver un hoyuelo.
Al llegar a casa, bajaron y caminaron hasta entrar. Una señora estaba en la cocina y olía fantástico.
-mi amor- abrazó por la espalda a la antes mencionada.
-Rob se me quemará- rió la señora.
- por favor Lauren, a ti jamás se te quemaría nada, todo sabe delicioso, ¿o no Aidan?- cuestionó al castaño de cabello largo.
-así es mamá- sonrió.
Al terminar la cena, comieron todos en risas y pláticas tontas. El ambiente era relajado y cómodo. Una familia unida que se demostraban el amor que se tenían.
Nuestro chico, que de algún lado lo he visto, se fue a dormir en su cama, claramente ni modo que en el suelo. Cada día más pendeja.
Siguiendo con la vida de este chico llamado Aidan, este ya se encontraba dormido plácidamente. Pero nos meteremos en su sueño.
Dentro del sueño
Se encontraba en una escuela preparatoria, él no entendía de donde se encontraba y miraba a todos lados.
-esta no es mi escuela- se dijo así mismo.
Sonó la campana, dando entender que ya era hora de irse o descanso.
Nuestro chico, Aidan, no entendía el porqué estaba ahí.
La gente pasaba a su lado para evitar golpearse con aquel chico.
Pero una chica de cabellera larga de color negro riendo con una chica un poco más baja que ella.
De un momento a otro hicieron contacto visual que solo duró 2 segundos, pero se sintió como una eternidad.
Ambos observaron sus ojos, ella de ojos color café y los de él, color verde.
T/N Smith
Seguíamos en el sueño de la comida o como se llame, Saúl, el guardián, nos dejó ir sin hacer más preguntas.
Felki seguía caminando un poco lejos de nosotros hasta que el ojiverde me detuvo poniéndose frente a mi con su ceño fruncido- ¿qué pasa?- cuestioné divertida.
El encogió sus ojos en modo de cansancio- ¿no te gusta Fernando?- me reía y él me fulminaba con la mirada.
-oigan caminen, ya casi salimos de este sueño- gritó y caminamos más rápido.
-¿qué sueño sigue?- cuestione a Felki.
Me miró- T/N- mencionó.
-¿qué?- fruncí mi ceño.
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El chico de mis sueños
FantasyEl amor de tu vida, ¿cómo sabes qué es el amor de tu vida? Yo lo sé porque en el momento que vi sus ojos lo supe. Te encontrare fuera de mis sueños, y estaré enamorada de ti como la primera vez que te vi en aquel sueño. ¿Cómo se busca entre tanta...