Capitulo 8: Cuidado

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Ya eran las 6 de la tarde en el pizzaplex y Vanessa estaba con su grupo que ya estaba algo reducido ya que algunos se fueron del local o estaban en otras atracciones, dejándolo con un grupo de cinco personas que comían una pizza mientras hablaban de cualquier cosa.

- Y entonces eso paso, es sorprendente no es así – comento graciosa Anna para luego dar un sorbo a su bebida.

- No puedo creer que hiera eso, pero bueno se merecía la golpiza que le diste – dijo Mark mientras daba un mordisco a la pizza.

- Estoy con un monto de raritos – dijo Vanessa de manera burlona.

- Mira quien lo dice, la que buscaba en el trabajo métodos de tortura medievales – dijo Daniel con una ceja levantada.

- He ya se lo dije, era para ayudar a un amigo en trabajo que quería hacer... que mal que lo cancelo – respondió Vanessa algo molesta.

- Si, muy conveniente no te parece – dijo Luis de manera de burla.

- No te burles, que tú también haces cosas extrañas como escapar de la casa de tus padres para conseguir un apartamento el cual es demasiado simple –

- Solo te diré que me ha ido bien, además es muy acogedora, suena mucho mejor, pero si tu quieres puedes estar en mi habitación para ver lo cómoda que es –

- Hablas en sueño, no sé si te lo habían dicho ya –

- ¿Si y que fue eso que dije? – dijo Luis acercándose más a Ness.

- Eran un monto de palabrotas sin ningún tipo de sentido – dijo Ness también acercándose.

- Oigan dejémosle espacio a estos dos – susurro Anna a Mark y a Daniel quienes aceptaron ya que seguramente solos podrían decir sus sentimientos.

- Oh, la verdad es que no dormía, estaba leyendo las redes sociales de Nora, ugm ella es una perra total –

- Vale no me odies, pero ella ha sido demasiado amable conmigo, ósea creo que lo de Tristán la afectado más de lo que aparenta–

- Mientes, se parece a un jodido robot – dijo molesto el chico mientras recargaba nuevamente en la silla – pero bueno ¿quieres un trago? – pegunto sacando una botella de cerveza de su mochila.

- Creo que, si empezamos a beber, seguramente la echaremos a perder por lo cual creo que no es la mejor idea en estos momentos además estamos es un lugar para niños, y si no canchan me echaran la bronca a mí, y volveré a sentirme fatal –

- Ya, tienes razón, pero ahora no estás en tu tiempo de trabajo, estás en tu tiempo libre, entones hasta que rodemos –

- Ya te lo dije si bebemos en este lugar nos va a ir peor –

- No digo que bebamos como esponjas – dijo mientras abría la botella.

- ¿Qué estás haciendo? – dijo Vanessa algo molesta.

- Solo te diré que me dio sed y los medios te ponen mona lo sabias –

- Yo ¿mona? ¿enserio crees que soy mona? – cuestiono apenada por aquellas palabras que le dijo Luis que la miro con una ceja levantada, por lo cual se puso nerviosa tirando su bolsa haciendo que algunas cosas cayeran al piso – Genial lo que me faltaba ¿Dónde está? – dijo Vanessa que no encontraba su lápiz labial.

- Está al fondo contra la pared– dijo Luis mientras extender la mano, pero entonces comenzó a toser.

- Oye ¿estas bien? – pregunto Vanessa para luego ver que Luis sacaba algo de su bolso, al parecer era un inhalador que lo uso así parando de toser - ¿seguro que estas bien? No creo haber ayudado mucho en eso -

Buscando al conejo blancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora