Always

Mi Regalo Para Tí

La vida avanzaba a una velocidad enorme, hace unos meses me veía lista para fugarme a Japón al no soportar un día más mi estadía en Inglaterra, luego apareció Sesshomaru frente a mí, ¡Aquí en Londres! Desde entonces todo fue a gran velocidad, claro, eso sin contar el primer tortuoso mes después del accidente, solo el primero ya que luego fueron meses maravillosos, intensos, una nueva etapa en nuestra relación de pareja.

Cuando menos lo pensé ya estaba defendiendo mi tesis de MBA, nuevamente que mi suegra se graduara en administración de empresas también era algo que me ayudaba mucho, sobre todo cuando era tan excelente profesional, incluso a la distancia y con todo el tiempo que pasaba conmigo no descuidaba su trabajo en Japón.

Luego llegó la graduación, fué un momento agridulce, estaba felíz,una meta cumplida más en mi vida, Sesshomaru estaba a mi lado, éramos felices, pero... mis padres no estaban conmigo. Papá se disculpó por no poder ir,era ya algo normal, aún cuando se mantenía en contacto y me deseaba lo mejor no solía ir a ninguno de mis actos o graduaciones, mamá... madre no había vuelto a contestar ninguna de mis llamadas o mensajes, había ido a casa pero nunca la conseguí, era como si se hubiera esfumado, me odiaba por seguir con mi vida cuando toda mi vida la había vivido para ella. En su lugar ahora estaba la señora Irasue, ella misma me había abrazado y me había llamado su hija, fue un hermoso y doloroso momento, ella se había ganado todo mi cariño y respeto.

Ahora apenas una semana después de mi graduación estaba visitando santuarios sintoistas en todo el reino, la señora Irasue no se conformaba con visitar los de Londres o de Inglaterra, habíamos ido a Gales y Escocia ya, y por como iban las cosas no acabaría allí.

* * * ☀️ * * *

Caminé por aquel hermoso jardín por segunda vez, ya habíamos venido, la señora Irasue me contó que allí se había casado con el señor Toga y la verdad desde que crucé el Torii sentí que era el indicado, pero mi suegra consideraba que debíamos seguir buscando, pero mírenme, había aprovechado mi día libre para escaparme a este santuario nuevamente.

Tatton Park era un lugar hermoso en general, parecía mentira que existieran lugares así en Inglaterra o el mundo, era hermoso, todas sus áreas lo eran, podría tardar días en disfrutar cada uno de sus 2.000 acres ya que cada área era diferente, debía venir otro día con Sesshomaru y Yako. Pero el Jardín Japonés era lo que más me había atraído, era como volver a casa, como estar en Japón, pero también era como estar en occidente, en Inglaterra, era curioso xq no se sentía que estaba mal, era como Sesshomaru, una mezcla de ambas culturas, además que su santuario me traía tanta paz, era el lugar perfecto para la ceremonia Shinto, para nuestro ritual de purificación.

Luego de hacer una oración a los kami para que bendijeran a mis seres queridos seguí recorriendo el lugar, no podía estar más segura de algo, el lugar era perfecto. Me senté bajo un árbol contemplando desde allí el río. Tenía poco más de 20 minutos cuando un joven se me acercó.

-Disculpe señorita, el jardín japonés está cerrado al público-me dijo con un tono amable.

-¿Cerrado?-la verdad no había reparado en que el lugar estaba solitario, me había cerrado en mi mundo que no reparé en ello.

-Sí, por cuestiones de seguridad, el lugar está diseñado para ser observado, no queremos que los visitantes sufran un accidente al resbalar con el musgo o los caminos de piedras redondas.

-Oh, lo siento, no lo sabía-él me ofreció la mano para ponerme de pie-es una lástima,es un lugar hermoso.

-Sí, lo es, pero no hago las reglas, solo tengo que cumplirlas y hacer que se cumplan-nos pusimos en marcha a la salida, ahora me sentía triste, era el lugar que me había gustado para la boda y no podía ser-Usted vino en estos días ¿Cierto?-el joven me miraba-Con la señora Irasue Taisho.