Blood Ocean | ¡Yandere! x Reader | One Shot's

【¡Yandere! X Reader】【Especial de cumpleaños】

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【H A P P Y  B I R T H D A Y】

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En tus recuerdos está la imagen de cumpleaños anteriores, ahora un poco difusos con el paso del tiempo, momentos que en tu cabeza están llenos de felicidad, la situación de ahora no se ha desecho de la emoción, de tal manera que aun añoras el sentimiento, sentirte feliz y rodeada de gente que amas y que te ama.

La realidad parece diferir de tus memorias, porque en este momento no hay nadie acompañándote, hay unos cuantos mensajes de algunos compañeros de tu nuevo trabajo, pero las palabras se sienten vacías, no hay nada que reemplace o llene el sentimiento que desde hace mucho tiempo se desvaneció.

Detective Jace:

Feliz cumpleaños, estaremos atentos a cualquier incidente, por favor tenga cuidado e infórmenos cualquier movimiento extraño.

Yo:

Muchas gracias.

No hay energía en tu cuerpo para demostrar el desprecio, no en este momento al menos, estabas cansada de la rabia y la impotencia, querías descansar de ellas al menos un día.

No has sabido nada más del hombre enmascarado, la policía no parece poder o querer encontrar indicios, como si hubiese algo bloqueandolos, como si alguien se estuviese entrometiendo, lo cual no dudas, claro como el agua es que no es un hombre cualquiera, estás mareada de tanto pensar, pero tu corazón golpea contra tu pecho mientras las horas pasan.

¿Volverá por ti?

¿O se habrá rendido ya?

Te acuestas a dormir, preparándote mentalmente para lo que verán tus ojos cuando los abras.

Te sientes pesada, no puedes mover tu cuerpo, como si algo estuviese montado en tu pecho, intentas abrir los ojos, intento fallido, todo lo que obtienes como respuesta de tu cuerpo es un ligero movimiento de párpados.

Te sientes drogada.

No lejos de la realidad.

— ¡Illya la estás ahogando! ¡Bajate! — La particular voz del enmascarado fue tu bienvenida, el maullido de la gata sonó justo encima de ti, tu cuerpo responde mejor y cuando logras abrir levemente los ojos tu mirada es devuelta por unos brillantes ojos felinos, la gata ronronea, demostrando lo contenta que está de verte.

— Hola Illya. — Con pesadez, porque la droga aún no se había desvanecido de tu cuerpo, acaricias su cabeza y espalda.

— ¿Y no hay un hola para el dueño? Tanto tiempo sin vernos, bueno, sin verme ¿Vas a decirme que no me extrañaste ni un poco? Parecias contenta con todos los regalos que te dejé la última vez. — Ignorarlo pareció una buena opción.

Especialmente porque no había una manera no comprometedora de responder su afirmación.

No le dirías en su cara que apreciaste los regalos en cierta medida, sobre todo porque fueron los únicos regalos que recibiste.

Los sentimientos referentes a este hombre eran complicados, nada podía comprarse al terror que sientes por el, pero al mismo tiempo, no puedes soltar el cariño que te demuestra, aunque no puedes confiar, lo que te dejó a ver durante varios días podría perfectamente no ser su verdadera cara.