Memories

15. En un entorno extraño

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Dejamos su cuerpo en la cama con poca delicadeza.

- Muy bien, ya está en su habitación - Diego sonaba paranoico. Se giró hacia mi y tomó mis hombros -. Ahora dime de qué mierda hablaban esos dos.

Sacudió mi cuerpo y con fuerza me solté de su agarre.

- Sueltame, me preguntas como si lo supiera, escuché lo mismo que tú - ladré y retrocedí.

- Ellos dos están juntos, están traicionando a Cinco.

- Ese no es lo más importante ahora.

- ¿Entonces cuál es? - casi gritó.

- Luther amenazó a Dalia con contar ese pequeño secreto - la miré tendida en la cama -. Sea lo que sea, tiene que ser algo grave para que Dalia se halla comportado de esa manera.

- Ahora que lo mencionas, el comportamiento de Luther no fue normal, ¿viste como se arrodilló pidiéndole perdón? - agregó y el caos que ya era mi cabeza, empeoró.

- Este par trama algo.

- Algo muy grave, aparte de su pequeña relación a escondidas de Cinco.

Observé con mayor atención el rostro de Dalia. Su frente estaba arrugada, cómo si un rasguño hubiera estado ahí y hubieran intentaron cubrirlo con maquillaje.

- Yo me voy, te veo en la cena - habló Diego y sin despegar la vista de Dalia asentí.

El sonido de la puerta cerrandose me dió a entender que ya estábamos solas.

- Eso en tu frente no estaba antes. Es como si te hubieras golpeado y hubiera dejado una cicatriz.

Una cicatriz.

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Salí de mi habitación en dirección a la azotea. Caminé por el gran pasillo y unos brazos rodearon mi cuerpo por detrás.

- ¡TN! - la voz de Ben sonó tierna cerca de mi oído - ¿Cuando despertaste y por qué no me avisaron?

Me soltó y dí media vuelta para encararlo, su sonrisa era inmensa, cómo si hubiera ganado el premio Nobel. Hundí mis cejas y le correspondí la sonrisa.

- ¿De qué hablas, Ben? Desperté hace más de un mes - respondí.

- ¿Qué? No, tú estabas en coma, papá nos dió la noticia hace dos meses - contestó seguro.

- Ben, yo estuve en coma casi dos años y ya desperté. ¿Por qué dices que hace dos meses te enteraste?

- Así fue - frunció el ceño y me miró extraño -. Bueno déjalo, hace un rato sufrir un espantoso dolor de cabeza, de seguro estoy delirando.

- Es lo más seguro.

- Aún así, me da gusto verte, a ver cuándo vamos a la biblioteca a elegir libros, cómo solíamos hacerlo antes - sonrió.

- ¿Ah?

- A claro, es normal que después de tanto tiempo en coma no recuerdes muchas cosas. Pero eso solíamos hacer, para ti era lo mejor del día.

- Gracias por ese recuerdo. Nos vemos, Beni.

Me despedí y él igual.

Seguí mi camino aún extrañada por ese comportamiento de Ben. Era raro el como no recordaba mi llegada después de tantos días.

Pasé por una habitación en particular y de ahí emergieron Vanya y Allison. Su sonrisa se ensanchó cuando su vista se posó en mi y fue como ver a Ben de nuevo.

- ¡Hermana! ¡Despertaste! - ambas soltaron al unisono, emocionadas.

Antes de poder decir algo sus brazos rodearon mis hombros y me atrajeron hacia sus cuerpos. No tuve otra opción que corresponderles el abrazo.

- ¿Ustedes tambien?

Liberaron mi cuerpo y las miré confundida.

- ¿Cuando despertaste? - Vanya fue la primera en preguntar.

- Hace más de un mes. ¿Lo olvidaron? Ustedes estaban en la sala con los demás cuando me vieron por primera vez.

Ambas se miraron extrañas y después volvieron su vista a mi.

- Recuerdo algo así - dijo Vanya confundida -. Si, ya lo recuerdo, yo te dije algo sobre practicar. Pero eso pasó hace unas horas, ¿no?

- No, Vanya, eso fue hace un mes y nunca practicamos, dejaste de hablarme después de eso - hablé.

- ¿En serio?

Asentí.

- ¿Qué les pasa? Ben igual acaba de hacerme las mismas preguntas - solté.

- No sé, pero yo el último recuerdo que tengo antes de esto, es estar con Dalia a solas en mi habitación, pero eso fue 4 meses después de tú accidente - confesó Allison extrañada con lo último.

- Pues eso fue hace ya tiempo, porque yo diré dos años en coma - informé.

- ¿Sabes, Allison? Solo estamos algo mareadas por el dolor de hace rato, de seguro en un rato se nos quita, vamos con mamá mejor - recomendó Vanya a nuestra hermana -. Que alegría que hallas vuelto. Adiós, hermanita.

Me despedí de mano y miré como se iban, estaba apunto de seguir mi camino cuando Allison se giró y gritó:

- Ve a ver a Cinco, de seguro está muy emocionado por verte, te extrañó mucho todo este tiempo - sonrió desde lejos y caminó junto con Vanya al primer piso.

Muy bien, esto ya me está asustando.

Dejé mis pensamientos de lado y seguí mi camino a la azotea ya sin ninguna interrupción.

Abrí la puerta y el aire fresco me recibió, tomé mejor mi cuaderno y salí por completo a la azotea. El cielo estaba oscuro y las estrellas brillaban con intensidad al igual que la Luna.

Tomé asiento en la orilla y abrí mi libro, el dibujo de la chica misteriosa plasmado en la hoja.

¿Quien eres?

Su rostro me parecía familiar, solo que no sabía en dónde la había visto. No lograba recordar a la chica.

- ¿TN?

La voz de Cinco sonó a mis espaldas y rápidamente cerré el libro.

- Te dije que no te quería cerca de mi - hablé y giré mi cuello para mirarlo por encima de mi hombro.

- Quise pasar tiempo con mi mejor amiga - sonrió amable -. Es bueno verte de nuevo.

¿De nuevo?

¿Qué mierda pasaba hoy?

Era como estar en un entorno extraño. Desconocido.

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Nuevo Capítulo

¿Cómo les parecío?

Las actualizaciones serán más seguidas porque ya salí de vacaciones.

Así que nos vemos mañana.

Los amo.

Con amor, Esme