Capitulo 24

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-PUJA!-

-AHRG!!! ¡¡ESTO ES UNA LOCURA!!-

-T-Tu puedes mi amor~-

-¡¡CALLATE!! ¡¡TU ME HICISTE ESTO!! ¡¡VOY A MATARTE!!-

Nadie en su vida había oído a Tamaki Amajiki-Yagi gritar tanto y mucho menos amenazando de muerte a alguien.

-SOLO UN POCO MAS, EL BEBE ESTA APUNTO DE SALIR-

-AAAHHH-

Lágrimas escurrían por las mejillas del azabache, eso de sacar un melón por la abertura del tamaño de un limón no era nada lindo, el sudor se combinaba con el otro líquido y su expresión demostraba lo mucho que esto le dolía, agradecía tener a su esposo a lado, ya después se disculparía por casi romperle la mano.

Después de casi seis horas de parto por fin Tamaki podía respirar tranquilo, regularmente claro pero más calmado, oír el llanto de su pequeño hijo lo hacía sonreír cayendo ahora lágrimas de felicidad por sus ojos, al menos estaba mejor que su esposo.

-Aaay míralo Tami~ es precioso!- Mirio lloraba a moco suelto mientras las parteras entregaban el pequeño envuelto al ser que le dió vida.

-Lo es~-

Ambos abrazados miraban con anhelo a su primogénito.

-Hermano!- Izuku entro al cuarto cerrado y se acercó corriendo a su hermano y cuñado.

-Zuzu~ Mira! Mira! Es precioso~ es el niño más hermoso de la vida!-

Al peliverde le brillaron los ojos y también le causo gracia ver el rostro atontado de su hermano, era igual de perdida cuando conoció al azabache.

-Puedo?- pregunto acercándose a Tamaki quien cargaba al pequeño infante.

-Claro- Tami tenía los ojos bastante cansados, lo que más necesitaba ahora era tomar una siesta pero no quería perderse el ver a su hijo.

El pecoso recibió en brazos a su primer sobrino y sonrió con real ternura mientras le acariciaba una mejilla, por el movimiento el pequeño abrió un poco sus ojos.

-Wow~ sus ojitos son como pequeñas lagunas~- estaba apunto de soltar lágrimas, le pasó el bebé al padre y este pudo apreciar también los bellos ojos que tenía.

-Por los dioses~- Mirio se sentó a lado de su pareja y apoyo la mitad de su cara en su hombro, con un brazo sostenía al recién nacido y con el otro abrazaba al azabache.

-El mejor regalo del mundo es tenerlos conmigo~ Te Amo Tamaki, gracias~-

Amajiki sonrió y le plantó un sutil beso sobre sus rubios cabellos, susurrándole lo mucho que también lo amaba.

-Deku! Por qué corriste asi~- a la escena llegó un Katsuki desaliñado con respiración entrecortada, su querido prometido lo había dejado atrás para ver a su sobrino.

-Lo siento Kacchan, enserio quería verlos-

El cenizo solo suspiro y se acercó a su pareja para apoyarse en uno de sus hombros.

-Felicidades- les dijo a la pareja relajando el rostro y mostrando una pequeña sonrisa.

-Gracias~ y gracias por venir- le respondió Mirio viendole también con calma.

-Vaya~ la reunión familiar inicio sin nosotros?-

Shinzo junto a sus padres y pareja llegaron a la habitación con mejor estado que el joven cenizo.

-Hermano!- los recibió Izuku con su habitual sonrisa.

-Nuestro sobrino es precioso!-

-El más hermoso del mundo!- le siguió el rubio jefe del clan Yagi

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