[SEGUIR AL DESTINO] 💥🥦KATSUDEKU ✨MEDIEVAL

Capitulo 22

-... ¿Cuándo?-

-Apenas iniciamos la construcción pero me gustaría que Izuku estuviera presente para los detalles-

-¿Tú estás de acuerdo?-

-Quisiera estar ahí papá tanto como quiero estar aquí, por eso iniciaremos solo con visitas más frecuentes ¿Están de acuerdo?-

-Por nosotros no hay problema, puedes pasar el tiempo que quieras allá Zuzu, claro con permiso de los Bakugou-

-Mis padres dieron su consentimiento está mañana, estarán encantados de recibir a Izuku cuando sea-

-Bien, entonces no hay más que discutir, como siempre te pediré que cuides a nuestro hijo, joven Bakugou-

-Lo haré hasta mi último respiro-

Katsuki e Izuku se encontraban teniendo una plática con los padres del último, los mayores sabían perfectamente que esta petición llegaría más pronto después de confirmar su emparejamiento y estaban contentos por ver a su hijo menor feliz, aunque eso significará verlo partir.

-Gracias mamá~-

-No llores Zuzu, no es para tanto, seguirás viviendo aquí hasta que la casa quede terminada-

-Por supuesto!-

El peliverde fue abrazar a su progenitor, sabía que la hora de su partida estaba cerca así que debía pasar más tiempo con su familia, no es que no los vaya a visitar cuando se mudé pero claramente ya no iba a ser lo mismo.

Después de las pocas pero sinceras lágrimas todos fueron a cenar con Mirio que los había invitado de manera repentina.

-Hermano!-

El pelimorado que ya estaba en casa de su hermano mayor recibió en brazos a su hermano menor, ya no se veían todos los días como antes, solo hace tres semanas Shinsou había empezado a vivir en un lugar propio con su empoderada pareja, las cosas no eran simples pero tampoco eran difíciles, estaba acostumbrado a la actitud de su pareja y lo aceptaba tal cual era, al igual que Monoma aceptaba lo poco extravagante que era su destinado, el amor es lo que los unía y eso bastaba para ser felices.

-Zuzu que alegría verte, a ti también Bakugou-

El cenizo solo asintió ante el saludo.

-Zuzu!~- Monoma llegó robando de brazos de su pareja a su cuñado, aún se sentía un poco culpable por lo ocurrido antes del ritual a pesar de que el pecoso ya había aceptado sus mil disculpas.

-Hola Monoma!- saludo como pudo mientras era apachurrado.

-Oi!- Está de más decir quién fue el que reclamo.

Osea si cambió pero eso no le quitaba los celos.

Después del intercambio de saludos y gruñidos del blondo pasaron a la sala donde yacía preparada la cena con los dueños de la casa recibiendolos cálidamente.

-Papá! Que alegría que aceptarán venir! Vengan siéntense todos, comencemos a comer-

Tal y como había indicado todos tomaron sus lugares y procedieron con la cena de manera monótona, fue al finalizar que Mirio y Tamaki se pusieron de pie abrazados llamando así la atención de los invitados.

-El motivo de esta pequeña reunión familiar es para darles una gran noticia-

-N-Nosotros decidimos pedir a los dioses un...un...-Tamaki inhalo y exhaló para darse fuerza a el mismo, él quería ser quien fuera a dar la noticia.

-L-le pediremos a los Dioses un hijo~-

Todos quedaron estáticos por la sorpresa.

-Un nieto!- Yagi fue el primero en pararse y felicitar a la pareja.