𝐏𝐀𝐑𝐓𝐄 𝐃𝐎𝐒
(𝐒𝐄𝐆𝐔𝐍𝐃𝐎 𝐕𝐎𝐋𝐔𝐌𝐄𝐍)
Luego del incidente que Marlene Lockley tuvo con su mejor amigo Jadon Sancho, la inglesa busca olvidarse del romance pero un cierto argentino que fue el principal problema en su relación con Jadon no...
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Lisandro Martínez
Había pasado exactamente una semana después del incidente de la subasta. Desde ese entonces no he visto a Lockley luego de que me haya restregado en la cara su nuevo ligue. Por supuesto que me sentía celoso y molesto con ella, no pensé que me haya superado así de rápido cuando yo seguía teniendo absurdas fantasías con la británica.
Dejé pasar su actitud estos días, pero siendo honestos, no podía. La curiosidad me mataba de el porqué de sus acciones. Qué le hice?
-Yo digo que tienes que hablar con ella- sugiere Marcus.
-Te dije que le mencionaras que aún no la superabas- regaña Antony -acaso crees que reaccionó así porque te vio muy pegadito a Kaya?- cuestiona.
Carraspeo -lo dudo, Kaya se olvidó de mi toda la noche que me la pasé hablando con ejecutivos- ruedo los ojos.
-Necesitan dialogar!!- insiste el moreno -a lo mejor hiciste algo que le molestó demasiado.
Suspiro muy fuerte -yo hacerle algo?!- respondo frustrado -lo nuestro siempre fue especial y único. Danny, Esmeralda y Triana me dijeron que era la primera vez que Lockley se estaba enamorando, fui el chico afortunado!!
-Aha eso, te recuerdo que no solo existían ustedes dos- recalca Rashford.
-Ese es mi punto. Me duele que Mar me haya superado tan rápido luego de que yo la haya ayudado a superar a Jadon- confieso derrotado.
Me dejo caer en mi sillón, el brasileño se acerca a consolarme -no hay que precipitarnos- desmiente -aún no sabemos si Mar está con el portugués o solo lo hizo para fastidiarte.
Marcus asiente -eso si, si algo le molestó a Mar, ella no se va a quedar con los brazos cruzados. Prefiere empeorarlo que hablarlo- rueda los ojos.
Me levanto de sopetón -voy a su casa!- tomo las llaves de mi auto.
-Espera!!- detiene Rashford -deja veo si está disponible- explica.
-Cómo?
-Ay, Licha! Parece que no aprendes del pasado- Antony se tapa la cara con sus manos.
-Hay que asegurarse que esté sola y evitar involucrar a terceros- explica.
Tenía un punto válido -bien pensado- coincido un poco más relajado.
Marcus me da luz verde de ir al apartamento de Mar y cuando llego, encuentro que no era el único futbolista que esperaba a que le abrieran la puerta. El mediocampista español Rodri estaba también esperando.
Lo saludo amable -espero ver a Lockley- indico para no quedarnos en un incómodo silencio.
Rodri adopta una expresión confusa -vienes a ver a Liz?
-No, busco a Mar- aclaro.
-Ah! Menos mal- suelta un suspiro de alivio
Noté a Rodri extraño -por qué te incomoda si fuera ver a Liz?- deseaba saber.
El español me mira con cara de pocos amigos pues quizá pensó que estaría jugando con él-fue mi pareja e intento regresar con ella- aclara serio.
-Oh, ya veo. Descuida, no conozco a Lizbeth. Yo solo quiero hablar con Mar- aclaro para evitar meterme en problemas.
Rodri no sigue la conversación y luego de unos minutos de silencio más, las hermanas Lockley llegan al apartamento con bolsas de compras en las manos. Observo a Mar que una vez que cruzamos miradas, su rostro cambia reflejando sorpresa y frustración?
Qué mierdas le hice?!
Mar Lockley
Mi día estaba yendo de maravilla, mi mañana fue de lo más agradable, llegué a mi trabajo sin mucho qué hacer, por lo que salí temprano dándome el perfecto tiempo de irme de compras con Liz para pasar tiempo de caridad con mi hermana mayor. Hasta que veo a Lisandro Martínez esperando en mi apartamento.
Oh! Y también Rodri -tu novio está aquí- resalto hacia Liz.
-No es mi novio- reniega -aún no lo perdono por lo que me hizo.
-Vaya! Si que ustedes se parecen a Rachel Green y Ross Geller de FRIENDS- hago referencia a la sitcom.
La castaña rueda los ojos -también el argentino requiere de tu presencia.
Bufo ante ello -no pienso hablar con él.
-Solo escucha lo que tenga que decir, si no te deja en paz, le pido a Rodri que lo eche a patadas- sugiere Liz y nos aproximamos a los futbolistas.
-Caballeros, se les ofrece algo?- cuestiono irónica.
El español es el primero en responder -de hecho, pensaba en hablar con Lizzy en privado, si no les molesta?- pide amable.
-Ok, ustedes pueden entrar al depa, no me tomará mucho tiempo el hablar con él- señalo al del United.
Liz saca las llaves -pasa, Rodri- invita y cierran la puerta por detrás.
Martínez me mira fijamente -te puedo ayudar con las bolsas?- ofrece.
-No- las aviento al suelo -qué quieres?- pregunto cortante.
-Te hice algo?- cuestiona serio -porque que yo sepa antes de la subasta hablamos muy cómodamente. Acaso hay algo que te incomoda de mi? Dime, Mar! No quiero que esto se quede así- ruega.
Podía ver en su rostro reflejado el sentimiento de culpabilidad, algo que ocasionaba que me sintiera débil, con ganas de perdonarlo y lanzarme a sus fuertes y cálidos brazos. Con eso bastó para que no fuera capaz de contarle la verdad, pues sentía que me iba a juzgar por algo que debí de haber superado.
Creo que mi coraje ya no tenía sentido -no es nada- confieso mintiendo -el problema soy yo, ok? Tu jamás me podrías lastimar.
No era capaz de seguir mirándolo, por lo que me giré a abrir la puerta para dejarlo solo -es porque me viste con Kaya?!- pregunta insistiendo.
Desconcertada me detengo -qué?
Lisandro se toma su tiempo para responder -porque si es ella, déjame decirte que no somos nada- apresura a decir.
De nuevo lo encaro -yo pensé que ya era tu novia por lo que me dijiste en la boda de Danny y Scott- aquello si que no me lo esperaba.
El argentino cierra los ojos por un largo tiempo y después los abre -no, te mentí porque no quería que pensaras que no fuera capaz de dejar lo nuestro en el pasado- confiesa.
