𝐏𝐀𝐑𝐓𝐄 𝐃𝐎𝐒
(𝐒𝐄𝐆𝐔𝐍𝐃𝐎 𝐕𝐎𝐋𝐔𝐌𝐄𝐍)
Luego del incidente que Marlene Lockley tuvo con su mejor amigo Jadon Sancho, la inglesa busca olvidarse del romance pero un cierto argentino que fue el principal problema en su relación con Jadon no...
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Mar Lockley
Abro mis ojos para encontrarme con un Jadon Sancho sentado en una silla a un lado de la cama. Yo estaba acostada encima de las sábanas con solo una cobija tapándome el cuerpo. una vez que me incorporo, Jadon se percata que me he despertado por fin.
-No intentes mover mucho- detiene a punto de tocarme pero él mismo se detiene -tu cuello sigue un poco adolorido.
Ni cuenta me había dado que traía un collarín. Esto hace que mi respiración se acelere al sentirme asustada -qué ha pasado?!- pregunto agitada.
El moreno traga saliva -Rúben te ahorcó, te lastimó y me imagino que te insultó- detalla.
-Cómo supiste que estábamos en la oficina?
Baja la mirada -no confíe en él desde que los vi en el segundo tiempo- revela -y cuando lo vi entrando a tu oficina, quise detenerlo. Pero reporteros me impidieron el paso y cuando por fin me liberé, fue demasiado tarde. Discúlpame, Mar, por no llegar a tiempo.
No lo podía creer -pensé que me odiabas...
-Por supuesto que no- niega de inmediato -nunca dejé de cuidarte, simplemente mantenía la distancia pese a lo que me dijste ese día en la boda de Scott y Danny.
Más heridas comenzaban a abrirse. Te extrañaba, Jadon Sancho.
-Gracias, Jadon- agradezco.
Poco a poco, acerco mi mano al rostro de Jadon el cual reflejaba lo cansado y estresado que está. Una vez que tomo con delicadeza la mejilla de quién era mi mejor amigo, una energía se desprende transmitiendo la paz que ambos necesitábamos.
Cierra sus ojos dando un profundo respiro -lo siento demasiado, Mar...
-Hey, tú no tienes la culpa. No estaba en tu control en que reporteros- relajo.
-No hablaba de eso- niega -yo comencé todo esto. Te juro que jamás fue mi intensión que te pasara todo esto. Es mi culpa y de nadie más. Soy el responsable.
Me dolía verlo así -Jadon- llamo su atención y este me mira con sus penetrantes ojos cafés -la culpa es de los dos.
Acto seguido, junto nuestras frentes para consolarlo. Él en ningún momento me toca pero no se separa hasta que yo lo hago -no estaba seguro de si tan siquiera me querías ver- juega con sus manos.
-Tú siempre serás la persona más importante por la gran influencia que has tenido en mi vida. No por algo te acompañé hasta Alemania- ambos soltamos una risita.
-Nunca dejaste ser mi chica número uno- revela.
Sonrío por su cumplido y quizá por algo más...
Lisandro Martínez
Rashford marca el número de Jadon y este no contesta hasta el tercer tono -bueno?- habla Sancho.
-Jadon, Mar está contigo??- cuestiono sin dejar hablar a nadie.
Se toma su tiempo para contestar -si, ella está conmigo.
Todos respiramos aliviados -cómo está? Se encuentra bien?- pregunta Liz desesperada.
-Mar está bien. Ahorita está dormida- relata -pueden verla una vez que se despierte y recupere energías.
Es el mismo inglés que cuelga la llamada. Comenzaba a sentirme más desconfiado -tengo que ir con Mar.
-Licha- detienen Scott -sé lo que estás pensado- revela -créeme, es obvio. Todos pensamos lo mismo por lo de hace casi un año. Pero créeme cuando te digo que Jadon ha estado recibiendo ayuda para ser mejor persona. Esto solo es un ejemplo de ello, está claro que le sigue importando a Mar.
Vaya! No sabía de lo de Jadon -oh...
-Hay motivos para asegurarnos que Mar está en buenas manos- aclara Scott.
Liz se separa de Rodrigo -Licha y yo iremos a casa de Jadon para no abrumar tanto a Mar, les parece?- platea.
Nosotros coincidimos con su idea y llevo a Liz hasta la casa de Jadon Sancho. Nos tardamos por el tráfico en la ciudad pero logramos llegar. Tocamos la puerta y me llega varios dejavú al ver más detallado al atacante del United -dónde está?- me limito a preguntar.
Sancho responde -está en mi cuarto- señala -ya se despertó.
-Jadon- Liz hace que lo mire sólo a ella -qué fue exactamente lo que pasó entre mi hermana y Rúben?- cuestiona seria.
-El portugués la lastimó, yo llegué a tiempo antes de que pasara a mayores- revela haciéndeme sentir aún mas furioso con el Citizen.
-Ese hijo de la verga!!- se me escapa decir -le voy a partir el culo...
-Ahora lo que necesita Mar es a ti- interviene calmado -no ocasiones más problemas de lo ya hay- insiste.
No me podía contener -a qué te refieres?- sentía que insinuaba algo.
La hermana mayor se interpone -Sancho tiene razón- coincide -ve a ver a Mar, quieres?- pide calmada y yo subo hasta el cuarto donde estaba mi novia.
Nuestras miradas se conectan y me duele verla con un collarín -joder, Mar! Qué te han hecho?- me siento junto a ella.
Su sonrisa me relaja -estoy bien, Lisandro. Ya pasó.
La miro culpable -debí aproximarme a ti una vez que terminó el partido. No sé por qué no lo hice...
-No quieras culparte- me toma la mano -esto es consecuencia de mis actos, punto final.
-Pero...
-Quiero dejar de hablar de ello- pide abrazándome.
