VIII

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Su mirada vagaba de un lado a otro sobre la pizarra que se encontraba al frente del salón. El profesor llevaba hablando sobre algo ya desde hace 20 minutos, francamente él no le estaba prestando atención, más bien se encontraba disociando. En algún punto su mente lo transportó de vuelta a la noche anterior, se relamió los labios al recordar lo suaves que se sentían los de Steve sobre los de él.

— Pss, Eddie.

Su consciencia regresó a la realidad y volteó a ver a su lado para encontrarse a Dustin moviendo su cabeza hacia el frente. Al comprender las señales movió su mirada al frente y se encontró con la mirada del profesor sobre él.

— Joven Munson, ¿Puede responder la pregunta que le he hecho?

Eddie no sabía que hacer, había estado tan sumido en sus pensamientos que ni siquiera sabía que le había preguntado.

— Ehh... ¿Puede repetir la pregunta, por favor?—Estaba nervioso.

— No puede ser que no haya escuchado la pregunta que le repetí tres veces...

Maldita sea, sí había dejado la tierra por varios minutos.

— Al terminar las clases debe limpiar el aula por completo y además me ayudará a mover algunas cosas de mi oficina, eso le enseñará a prestar la debida atención.—Exclamó el profesor para después seguir con la clase.

Genial, ahora debía permanecer quien sabe cuántas horas más en la escuela. En fin, prestó atención a lo que restó de la sesión, que no fue poco, y ahora ya podían retirarse al descanso.

Salió a los pasillos que poco a poco se iban llenando de estudiantes y guardó algunas de sus cosas en su casillero.

— ¿Qué es lo que te tiene tan distraído?—Preguntó Dustin detrás de él.

En una milésima de segundo su cabeza se llenó de imágenes de Steve, pero evidentemente no le iba a decir eso a su amigo.

— He estado pensando mucho en el juego de hoy y lo mucho que voy a disfrutar ver tu cara de perdedor cuando te venza.

— En tus sueños, esta vez tú serás el perdedor.—Aseguró.

No mintió. Ahora un derrotado Eddie yacía en su puesto, pero no había perdido porque los otros chicos hubieran ideado alguna estrategia impresionante, sino porque se encontraba más concentrado en otra cosa que en el juego en sí.

— ¡SIIII!—Se escuchaban los gritos de sus amigos.

— Te lo dije, te dije que te venceríamos.—Dijo Dustin con aires de superioridad, de la misma forma que Eddie lo hacía cuando ganaba.

— Vaya, al parecer sí han aprendido algo de lo que les he enseñado, felicidades.

Los demás se quedaron un poco impresionados por el hecho de que Eddie no había empezado a soltar excusas del por qué había perdido, como lo había hecho en otras ocasiones, pero no dijeron nada al respecto, simplemente aceptaron la felicitación.

Una vez que acabaron de celebrar la victoria, todos guardaron sus cosas y se retiraron, excepto Dustin, Mike y Eddie quienes aún se encontraban acomodando algunas cosas en el club.

— Hey Eddie, Mike y yo estábamos pensando que quizá podríamos hacer algo saliendo de aquí, ya que has cumplido con el castigo que te han puesto en la primera clase.—Rio al recordar lo sucedido.— ¿Te parece?

— Creo que les voy a fallar.—Respondió.

— ¿De qué hablas? Hace un buen rato que no hacemos nada juntos, ¿Qué otra cosa debes hacer que sea más importante que estar con nosotros?

Don't you, big boy? (Steddie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora