023. old ali.

413 38 23
                                    

.
.
.

Ali y Milo estacionaron frente a la casa de Camryn Manheim, la casa en Venice, era impresionante, Aaliyah estaba acostumbrada a ver casas grandes, pero esa en específico, le parecía extremadamente bonita y familiar. La chica bajó del auto y el la guió por la entrada del jardín, hasta la puerta corrediza.

Al entrar, un par de gatitos naranjas se juntaron bajo las piernas de Milo, quién sonrió divertido, agachándose para acariciar las cabecitas de los mininos, Aaliyah se quedó en su lugar, sin saber bien que hacer.

-Ellos son Ziggy y Slim- presentó- no sé dónde estará Geoff. Ven, por aquí- tomó su mano, dirigiéndose hacia la cocina, el chico la soltó, para hacer un megáfono con sus manos- ¡Cammy!

Los pasos apresurados se escucharon desde la escalera, Camryn manheim apareció, iba descalza y abrió sus brazos para abrazar a su único hijo, el chico cerró sus ojos al sentir el abrazo de su mamá y sonrió.

-Hola Cammy- saludó el con una risita, mientras ella lo movía de lado a lado- ¿Me extrañaste?

La mujer tomó las mejillas de su hijo, apretando sus labios y moviendo su cara de lado a lado, para luego darle una palmada suave en su mejilla, sonrió.

-No te emociones- señaló divertida, luego miró a la castaña a su lado, que permanecía con sus manos juntas y aunque no parecía incómoda, parecía sentirse fuera de lugar- Te recuerdo, ¿eres Aaliyah?

-Si, soy yo- sonrió ella- está muy linda, me gusta su cabello, ¿se hizo reflejos? yo me los haría, pero mi estilista dice que me quedan mejor los oscuros, pero no sé, una vez tuve un delirio de ser rubia, ¿le ha pasado? a mi si, casi siempre, pero nunca lo hago.

Camryn frunció el ceño.

-Okay- le devolvió la sonrisa- debo suponer que eres mi afortunada nuera eh- codeó a Milo, con la sonrisa haciéndose cada vez más grande.

Milo asintió:-Si, Ali y yo somos novios.

Camryn lanzó un chillido emocionado, abrazando a la chica fuertemente, que se quedó fría ante ese gesto pero luego terminó por abrazarla de vuelta.

-¡Que lindos! ¡lo sabía!- exclamó ella- es que la forma en que se miraban, a mi nada me engañaba, parecían corazones sus ojos cuando se veían, ¡que emoción! pasen, pasen.

Aaliyah suspiró, bastante nerviosa, entrando a la sala de estar, dónde varias fotos de Milo, sus gatos y su familia estaban, la chica sentía aquella casa tan hogareña, recordaba que así solía sentirse la casa de sus abuelos, antes de que su abuela falleciera.

Así se sentía su casa, antes de que su mamá se fuera.

-Cuenten la gran historia- pidió ella, mientras iba a la cocina para buscar bocadillos- ¡no no! ¡no me cuenten! ¡esperen a que estemos todos! ¡estoy tan feliz!

Aaliyah no entendía porque Camryn Manheim estaba tan feliz porque su hijo tuviera una novia, miró a su alrededor, haciendo una pregunta:-¿Y tu papá?

-No vive en Los Ángeles, vive en las afueras de Nueva York- respondió Milo.

-Oh, ¿son divorciados?

-No exactamente, mi papá es gay- respondió el- son amigos con un hijo.

Aaliyah asintió, aún mirando a su alrededor.

-Genial, ¿también voy a conocerlo algún día?

-Depende, ¿cuánto tiempo quieres seguir fingiendo?- preguntó en voz baja, cuidando que Camryn no escuchase.

Ella se abrazó a si misma, dándole una media sonrisa, supuso que había sido tonto de su parte haber preguntado aquello, a veces no caía en cuenta de que todo aquello era una farsa, que nada era cierto y que lo único verdadero, es que tarde o temprano, tendría que despedirse de aquella casa hogareña en Venice.

lavender haze (milo manheim) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora