CAPÍTULO 4 | BENEVOLENCIA

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-No permitiré que te acerques a mi señor Hades nunca- fue lo que dijo quien apareció en escena.

Un hombre de armadura negra se dejó ver, sus rasgos masculinos bien definidos hacían contrastes con su buen rostro. Posicionado al frente de su dios exclamo:

-Soy la estrella de la violencia, Agaho de Bennu.

Evidente fue que esto no le importo en lo más absoluto al de Libra -¡Hazte a un lado!- alego Dohko preparando su Ataque -¡Los cien dragones supremos de rosa!- resonó su voz seguido del estruendo del ataque que fue en dirección a Agaho.

-¡Ingenuo, no podrás con esto! - siguió el espectro -¡Viento oscuro: ráfaga de la corona solar!- ejecuto su ataque en un instante, liberando una esfera de llamas que se concentró en su puño arriendo como el mismo sol.

El puño del peli azul fue bloqueado por el caballero de Athena haciendo retroceder al mismo tiempo. Las corrientes de aire que ocasionaba estaban cargadas de una fuerte energía proveniente del espectro. Este cosmos, su poder se compara con el de los caballeros de oro, pensó Libra al ver el poder de su contrincante. Dohko observo que lo único que pudo lograr fue hace que de la boca de Agaho brotará un poco de sangre, lo miró fijamente con recelo.

 Dohko observo que lo único que pudo lograr fue hace que de la boca de Agaho brotará un poco de sangre, lo miró fijamente con recelo

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¿De verdad le sorprende? Es uno de los dioses mayores, es normal que destruya ciudades solo porque le ha venido en gana, digo, hasta nuestro padre Zeus lo ha hecho.

Yo negué con la cabeza -Te equivocas, Hades nunca fue como sus hermanos. Él es diferente, nunca había visto algo como eso, jamás había destruido una ciudad- musite en lo bajo tratando de pasar entre los escombros -Si vamos a comparar... se parece más a Poseidón.

-¿Al tirano de los mares?- formulo Jazmín con confusión.

—Si, es que Zeus es aún peor- confesé.

Pasamos unos minutos en silencio, ella veía de un lado a otro en busca de una pista del Jahrezeit -Siendo sincera- la escuche decir tras mío -No reconozco ninguna de estas ruinas.

-Lo buscaremos, es indispensable que se reúnan- baje mi mirada al piso al sentir que había pisado algo, era una pequeña mano.

Me incline y quite los escombros de encima del pequeño cuerpecillo, el rostro de una pequeña niña de no más de unos 6 años fue lo que vi en aquella escena tan desastrosa. Solté un suspiro de frustración y quite los cabellos que le cubrían el rostro, toque su cuello dándome cuenta que no tenía pulso. Esa niña había muerto de una forma horrible, su cuerpo al igual que ella sería olvidado en este lugar donde todos fueron masacrados.

Cerré los ojos por un momento y dije -No puedo creer que el haya hecho esto...

Jazmín se inclinó a mi lado -Creo que es evidente que esto es obra del señor Hades- vocifero ella con un tono frío.

YOURS EVER ✔ | THE LOST CANVASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora