Dos Almas - VMin

0026

♡ Capítulo largo ♡

El dolor era insoportable cuando despertó, se sentía en una fuerte agonía mientras el doctor aparentemente se encontraba haciéndole una cesárea de emergencia, ni siquiera era parto normal y Jimin no sabía porqué. Supuestamente era lo que tendría ya que su cuerpo aceptaba el parto normal.

Y de repente, en medio de todo el caos que había en la sala de doctores, estando algo ido también por toda la anestesia general que le habían colocado, estaba mirando esa fuerte luz blanca sobre su cabeza con su vista demasiado nublada para su gusto, cuando Taehyung apareció en su campo de visión, reconoció sus ojos de inmediato ya que este portaba mascarilla y vestimenta apropiada para entrar ahi.

Tae tocó sus mejillas, y tomó una de sus manos mientras apegaba sus frentes.

— No te dejaré solo... nunca. Por favor discúlpame... Te explicaré todo, cariño... t-todo, en serio... — susurra con su voz quebrada. — Déjame estar aquí contigo.

Murmura, sabiendo que no era el momento. Pero no podía dejar solo a su omega en ese momento tan malditamente importante en su vida. En los ojos del menor se veía el dolor que le tenía al mayor, todo lo que quería decirle pero que claramente no podía hacerlo. Kim desvía su mirada de sus ojitos para llevarla hacia la marca, notando como estaba algo enrojecida, tenía ganas de darle su calor, besar en esa zona para que ya no le doliera.

Sus ojos vuelven a juntarse y Kim vió como en los ojos de Jimin habían lagrimas acumuladas dispuestas a salir, siendo una de estas la lágrima que se deslizó por su mejilla, lo que hizo a este mismo jadear, mirando hacia otro lado.

Dolía tanto verle así, pero las mentiras se sabían siempre, daba igual cuanto las ocultaras, siempre saldrían a la luz.

Y de repente, la habitación quedó en un silencio donde las máquinas de las pulsaciones y demás se escuchaban solamente, hasta que se escuchó un llanto de un bebé.

El tiempo se detuvo para Kim, pareció todo ocurrir en cámara lenta, este llevó su mirada hasta ahí, viendo a una cosita diminuta, pequeñísima en los brazos del doctor. Taehyung acaricia la mano del más bajito viendo como lo limpiaban un poquito antes de enseñárselo.

Jungkook tenía razón respecto a su apariencia física, pero no acertó en que era niña.

Jadea, sintiendo como sus ojos se cristalizaban cuando le ve, siendo tan pequeño, tan delicado. Tuvo que soltar la manito del menor para tomarla entre sus brazos, agachandose lo suficiente como para mostrárselo a Jimin, quien lo vió y le dedicó una dulce sonrisa, aún algo ido por la anestesia y todo en general.

— Dios santo... — Murmura Jimin, algo que no se entendió muy bien gracias a lo que tenía en su rostro. —

Pronto es tomado por una enfermera, quién la ducha en un lugar especial de la habitación mientras Kim trataba de no mirar mucho a lo que le estaban haciendo a Jimin, temía que su lobo creyera que no era algo bueno y terminará en otra cagada más de su parte.

El menor se duerme otra vez sin mucha fuerza, Kim acarició sus mejillas, estando ahí todo el proceso de la cesárea, hasta que Jimin fue trasladado aún durmiendo a la habitación de descanso, donde pronto podría darle de comer a la bebé por primera vez.

Cuando se puede pasar a la habitación Taehyung no tardó en hacerlo, aprovechando que Jeon no andaba en el pasillo, entró y cerró la puerta, viendo al menor dormir ahí con algunas cosas en sus brazos, escuchando sus latidos que estaban aparentemente normales, o eso esperaba el alfa.

Toma dulcemente una de sus manitos, y cuando menos se lo esperó, Jimin abrió sus ojos enrojecidos e hinchados,  dedicándole una mirada no muy agradable en cuanto lo reconoció, esta mirada tampoco era de odio, era solo de tristeza. El omega quitó lentamente su mano de entre las del mayor, mirándole y sintiendo ese fuerte nudo amarrar su garganta de golpe.