cap 38 final

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Ruedo por el techo, escucho a todos gritar incluído una voz que me es tan familiar.
Llegó a la orilla del techo y estoy a punto de caer pero logro agarrarme.
Miro hacia abajo y veo a los invitados en el patio haciendo un círculo y en medio de este el cuerpo sin vida de Enzo.

-¡Analee! -esa voz tan familiar me hace voltear.

Nuestros ojos chocan y no puedo evitar sonreír aún estando en esta situación.

-Espera ahí, bajaré por ti -dice.

-¡No! -digo cuando lo veo intentar bajar por el techo y casi caer- es demasiado peligroso -le digo.

-No aguantaras por mucho tiempo -dice.

Y tiene razón, las manos empiezan a quemarme, miro a mi alrededor y veo que en el techo está amarrado una cuerda con linternas en esferas de papel.
Lo volteo a ver voy recorriendome hasta quedar lo más cerca posible de la cuerda, saco una daga que tenia escondida en el cinturon del vestido, me estiro y sujeto con fuerza la cuerda.

-Te veo abajo -le digo. El empieza a negar con la cabeza-Marukh, te amo.

Entonces sin dudarlo me suelto de la cornisa del techo y corto la cuerda.
En el momento en que siento como soy jalada hacia abajo con fuerza suelto la daga y como puedo agarro con la otra mano la cuerda. Escucho a todos gritar y para ser sincera también me entran ganas de gritar, la manos me queman y me da nervios que termine estrellándose contra un muro que la cuerda se rompa.

«Por favor cuerda, soporta a este hermoso cuerpo.»

Veo que ya estoy más cerca del piso así que me suelto y cierro los ojos preparándome mentalmente para el golpe que me llevaré cuando choque contra el piso pero ese golpe nunca llega, al contrario, siento algo debajo de mi así que abro los ojos y veo a los chicos incluyendo a Giovanni y a Tayden sujetándome entre sus brazos.

-¿Estas bien? -me preguntan cuando me bajan.

Los veo estirarse y sobarse los brazos e intento ocultar una sonrisa.

-Si, gracias chicos -digo sonriendoles.

-Franco... -escucho a Flavio decir, lo miro y me atrapa en un cálido abrazo.

-Ey, Flavio... -digo sonriendo y devolviendole el abrazo.

-No es Franco, es Analee -escucho a Mateo decir.

-Franco, Lin, Analee, como sea, sigue siendo el mismo flacucho -dice Angelo fingiendo indiferencia.

-Yo también te extrañe idiota -digo riendo y de repente todos los chicos se unen al abrazo - oigan chicos, yo también los extrañe pero creo que debemos ir a ayudar a Marukh.

-Cierto -dicen separándose.

(...)

-Estamos reunidos en esta hermosa noche para darle la bienvenida a su alteza real, la princesa Analee hija del rey Dalbert quien va a reclamar su legítimo derecho al trono del reino de Landier -el primer ministro toma la corona y se acerca a mi.

Habíamos decidido continuar con la coronación, sabíamos que algo como esto iba a pasar así que mi madre mandó a hacer otro vestido el cual sería el que ocuparía para la coronación.
Lo se muy podría sonar loco que decidieramos continuar con la coronación después de lo sucedido pero así de loca esta mi familia.

- Analee ¿comprometes tu vida y lealtad a Landier y a todos sus súbditos?

-La comprometo -digo.

-¿Prometes protegerla y respetar sus leyes en tiempos de riqueza o pobleza, en paz y en guerra? -pregunta.

Sangre De GuerreraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora