GND-07

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–Yo soy Hoseok.

–Jin.

–Namjoon, para servirle.

Los chicos miraron a Jungkook esperando a que dijera su nombre. Por su parte, el más joven de los 6 solo se dio la vuelta para salir del edificio.

–Si nos apuramos llegaremos antes del anochecer. –Los miró–. Vamos.

–Oye tranquilo pequeño. –Dijo Tae acercándose a él–. Sé que empezamos con el pie izquierdo.

–¿Nos serás útil?

Los chicos lo miraron sorprendidos, con ninguno de ellos había tenido ese comportamiento, es como si estuviese a la defensiva. Tae lo miró por unos segundos, nadie en sus años dentro de la mafia le había hablado así.

–Si.

–Entonces estás dentro. –Lo hizo a un lado para entrar de nuevo al edificio.

–Tae. –Se acercó Jimin a él–. Necesitamos armamento, ¿Crees que nos puedas ayudar en eso?

–Tienen suerte de que Park sea mi hermano, de lo contrario sus extremidades serían decoración.

–Si no fuera tu hermano, tus dientes ya estarían colgando en mi cuello. –Dijo Jungkook mirándolo.

–Muy bien chicos, no es momento de pelear. –Los miró Hoseok–. Tenemos que trabajar en equipo.

–Te ves tan lindo tratando de ser rudo, pequeño.

–Lindo te verías chupandome la verga.

–¡Okey! –Rio nervioso Jimin–. Tae, ¿Nos puedes dar armamento?

–Claro. –Caminó hasta otra habitación dónde había escaleras–. Tengo muchas armas y municiones, ¿Saben usar una?

–Aprenderemos.

Al bajar las escaleras Tae abrió la puerta para entrar al sótano. Como todo sótano, era pequeño, había una mesa con municiones y en las paredes había varios tipos de armas.

–Escogan lo que quieran.

–Una tienda de dulces para adultos. –Susurró Hoseok mirando las armas.

–¿A qué te dedicabas? –Lo miró Jin.

–Pertenecía al mundo de la mafia, teniéndome a mi, tengan por seguro que seguirán vivos.

–Me tranquliza saber que tenemos un experto aquí. –Dijo Namjoon.

–Tomen lo que quieran chicos, tengo achas, navajas, armas, etc.

Cada uno tomó un arma. Hoseok se colocó un acha en la espalda y tomó un AK-47, era la primera vez que miraba de cerca una, estaba emocionado, tenía que aprovechar que ahora era legal llevar algo así por las calles.

–Estamos listos.

–¿Tienen algún plan?

–El plan es simple. –Dijo Tae mientras cargaba su arma–. Matar a esos hijos de perra.

Los chicos subieron a la habitación y salieron del edificio hacia la otra calle. Ahora con armas y más miembros sería mucho más fácil sobrevivir.

–¿Cómo hiciste lo de las cadenas? –Lo miró Jin.

–El edificio es mío, lo utilizaba para secuestrar a miembros de mafias rivales. –Lo miró.

–Por alguna extraña razón, me siento aliviado de tener a un criminal en nuestro equipo.

–Están en buenas manos Seok. –Miró de reojo al chico y bajó la velocidad de sus pasos para quedar a su lado–. ¿No piensas decirme tu nombre?

–¿Para qué quieres saberlo?

–¿Por qué estás a la defensiva? Tranquilo tigre. –Sonrió–. Solo quiero saber con quién pasaré mis últimos días.

–Morirás con la duda.

–Eres difícil pequeño, me gustan los chicos como tú.

–¿Quieres que te felicite? –Lo miró–. Estamos aquí para sobrevivir, no para follar.

–Oh cariño, caerás algún día.

–Veamos quién de los dos lo hace.

Hoseok levantó su mano en señal de que se detuvieran, algo que los chicos hicieron. A lo lejos miraron como una persona venía corriendo a su dirección con una orda de zombies a sus espaldas.

–Vamos ayudarlo. –Dijo Hoseok para luego correr hacia el chico.

Los chicos comenzaron a correr para acercarse al chico mientras disparaban a los infectados. No fue sorpresa para nadie que en poco tiempo terminaran con la orda. Hoseok se acercó al chico para asegurarse de que estuviera bien.

–¿Estás bien hermano?

–Si, muchas gracias.

–Tuviste suerte de encontrarnos, de lo contrario hubieras muerto. –Dijo Jimin acercándose a ellos, junto con los chicos.

–Lo sé.

–¿A dónde te diriges?

–Iba a la plaza para las evacuaciones, pero una orda me acorraló.

–Espera. –Dijo Jungkook acercándose al chico.

Miró su ropa y se acercó para oler esta, miró al chico al darse cuenta de que olía a vomito, como la sustancia verde que traía Hoseok en la mano ayer. Pasó su dedo por la mejilla del chico y miró la sustancia ya seca, tenía un color verde oscuro, era viscoso también.

–¿En dónde te metiste?

–Me encontré con un boomer.

–¿Boomer? –Dijo Namjoon confundido.

–Al parecer el virus muta cada cierto tiempo, esto se vuelve más peligroso.

–No puedes andar por ahí solo, ¿Por qué no te unes a nosotros?

–¿Unirme?

–Bienvenido. –Sonrió Tae dándole un arma–. Es mejor estar en grupo, solo no podrás sobrevivir.

–Supongo. –Miró el arma.

–¿Cuál es tu nombre hermano?

–Yoongi.