Siempre te amé

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Felix estaba acostado en su cama muy aburrido, ya había visto todas sus redes sociales y todo. No podía salir con alguien porque sus amigos estaban en Inglaterra y los de allí ya no podía decir lo mismo.

Para la suerte del pecoso, su mejor amiga, Rosé, llegó a la casa y subió a la habitación del menor.

—Hola, lindo. Arréglate que nos vamos de fiesta, pecoso. — Felix se asustó por cómo entró su amiga.

—¿Rosie, qué haces aquí?

—Te vengo a sacar de tu cueva. Si veniste a Corea fue para que te divirtieras. —Se sentó y miró al menor.

—Ya soy viejo para salir.

—Levántate rápido. —Tomaba a Felix de la camisa y lo movía— Alista las cosas rápido que Lisamore está abajo esperando.

—¿Voy a salir con ustedes dos? Sabes que odio ser el amigo mal tercio.

—Solo ve a bañarte y prepara un traje de baño, Lix. Saldremos de piscina.

—Ayyyy. —Rosé pellizcaba a Felix se los pies— Ya voy, mandona.

Se baño en 5 minutos y arreglo sus cosas en unos 10 minutos, para después el estar en otros 15 minutos y salieron en 30 minutos.

—Hola Nonna, tanto sin vernos. —Sonrió Felix saludando a Lisa.

—Felix, me alegro verte. —La mayor le devolvió la sonrisa.

—Si, si, si, después se saludan bien. Ya vamos tarde. —Rosé saca a los dos y se suben a la camioneta para irse al lugar de la fiesta.

—¿A qué fiesta iremos? —Se acercaba entre el espacio de los asientos de adelante de la camioneta.

—De unos amigos de por allí. —Dijo Rosé mientras veía a la ventana.

—Me dejarás solo, se que te irás con Lisa por ahí y siempre me dejas solo.

—No te preocupes Felix, ira gente que conoces. Te puedes estar con ellos. —Hablaba Lisa.

—¿Gente que conozco? —Asentía y el menor veía a su amiga— ¿Quienes son Rosé?

—Pues ya sabes... Hyunjin. —El nombre de el lo decía muy despacio pero lo escuchaba Felix.

—¿!Hyunjin!?— Rosé sonrió nerviosa.

—Son tus amigos, pecoso. —Miro a Felix asustado y luego vio a su novia— ¿Qué no me dijiste que Felix sabía, Rosé?

—Si le decía que iban a ir después me cancelaría y lo tenía que sacar de su cuarto o si no moriría ahí. —Se ponía a pensar lo que había dicho— Okay... mala idea bromear con muerte.

—Me hubieras dicho para arreglarme mejor. —Se veía en el espejo— Traigo la raíz horrible.

—Piensas mucho, Lix, como sea a Hyunjin siempre le vas a gustar como te veas. —Le guiño el ojo la rubia.

—Te odio, Chaeyoung.

—No me digas así, Yongbok.

...

Después de un rato manejando por fin llegaron al lugar, se veía que era de las personas de clase alta de Corea.

Bajaron de la camioneta y Felix les ayudó con unas cosas que traían ellas, las metió a la casa.

—Hola, muchas gracias por venir.

—No hay de que, más bien gracias a ti por invitarnos. —Rosé y Lisa saludaban a un peli negro, que por cierto muy musculoso— Espero y no te importe que haya invitado a un amigo.

Mis veranos sin ti ² Donde viven las historias. Descúbrelo ahora