AFTER DARK | PAUL LOHOTE - TRADUCCIÓN

08

Con mi cabeza en mis manos y mis codos descansando a cada lado de mi bandeja de comida llena, cerré los ojos y traté de desconectarme de la conversación que tenía lugar a mi alrededor.

Ya no me sentía yo mismo, no sentía que pertenecía aquí, ni a ningún lado. Yo no era la gemela de Bella, ni siquiera su hermana, ni siquiera estaba emparentada con ella. Charlie no era mi papá y Renee no era mi mamá y pensar en eso me dejó con una sensación de vacío por dentro.

Estaba confundido. Mientras tenía a esta increíble familia tratando de apoyarme y estar ahí para mí, me sentí abandonada. Sin embargo, la dura realidad era que así era. Mis padres biológicos, quienesquiera que fueran, me habían abandonado. No me querían y eso me hizo sentir muy mal por dentro. No sabía qué había hecho mal, era solo un bebé cuando me dieron en adopción, literalmente tenía unas horas. Había crecido en un hogar de acogida durante casi seis años. ¿Por qué nadie me quería antes de que mi mamá y mi papá vinieran y me adoptaran?

No era más sabio cuando era más joven y estaba feliz, pero ahora estaba pensando en eso sin parar. Apenas había dormido en los últimos tres días porque todo lo que podía pensar era que mis padres biológicos no me querían. Estaba tratando de encontrar excusas para ellos en un intento por hacerme sentir mejor al respecto, pero no estaba funcionando.

Lo único que mantuvo mi cabeza fuera del agua en este momento fue mi encuentro con Paul en el bosque hace un par de días. Era un extraño para mí y, sin embargo, sentí que podía contarle toda la historia de mi vida. Era como si lo conociera de toda la vida y solo hubiéramos conversado durante cinco minutos como máximo.

Cuando alguien chasqueó los dedos en mi oído, saltó hacia atrás de mis manos y casi se cae del banco en estado de shock. Dos manos, pertenecientes a diferentes personas, agarraron mis brazos para evitar que cayera hacia atrás y cuando miré hacia arriba reconocí que eran Angela y Mike. Me levantaron y sonreí agradecida.

–¿Qué diablos te poseyó para hacer eso, idiota?– Angela le disparó a Eric, quien estaba sentado allí con una sonrisa comprensiva en su rostro.

–¡No pensé que ella se asustaría así!– Eric se defendió, –Lo siento Sophia, solo estaba tratando de llamar tu atención.

Negué con la cabeza medio culo y lo saludé con la mano, –Está bien–. Murmuré, recordando que quería mi atención, –¿Qué era lo que querías?

–Vamos a surfear en la playa de La Push, ¿quieres unirte?– Me preguntó, –Viene tu hermana.

Tragué saliva ante la mención de mi hermana y le di una mirada a Bella rápidamente. Ella me miraba con simpatía y rápidamente desvié mi atención y me aclaré la garganta, –Oh, no sé chicos. Estoy un poco castigada en este momento.

–¡Oh, no, vamos Sophia!– Ángela dijo a mi lado, –Tienes que venir, será épico.

–¡Sí!– Eric vitoreó, –La Push, nena.

Entrecerré los ojos con curiosidad en dirección a Eric mientras Jessica hablaba, –Si está castigada, no puede venir, ¿Puedes Soph?

Puse los ojos en blanco hacia Jessica mientras me pasaba las manos por la cara sin maquillaje y me volví hacia Angela, –Quiero decir, puedo hablar con Charlie.

–¡Sí!– Eric vitoreó de nuevo, saltando sobre el banco y usándolo como tabla de surf, –La Push n–

–Mientras…– interrumpí rápidamente, señalando a Eric, –Mientras no vuelvas a decir eso nunca más.

Bella de repente se puso de pie y dejó la mesa con un murmullo inaudible, dejando que el resto de nosotros nos miráramos en un silencio inquisitivo. Giré mi cabeza para seguir su movimiento y me mordí el labio inferior cuando la vi parada junto a Edward Cullen mientras él estaba recogiendo su cena.