Ready For Love || Woo Dae-Sung || Un Amor Tan Hermoso

12. Sintiendo cosas extrañas

Capitulo 12

Shin Ha-ri

En la hora del desayuno

---Debiste poner atención y escucharme.---acuso a mi hermana, ya que me quitaron el que yo tenía también.

---No te preocupes, señorita, tengo uno de repuesto en mi salón de natación.---me dice Dae-Sung para que no me sienta culpable.---Mejor, ten esto.---dice mientras saca paños de resfriado de su bolso.---No vaya a ser que te enfermes y no vengas a la escuela, no quiero dejar de verte.

---Gracias.---le contesto sin ganas, ya que tengo un malestar desde hace rato.

---Ustedes también tomen uno.---los demás también toman uno mientras continuamos desayunando.

En medio de la clase, Hee-Ji y Su-Jin tosen y estornudan, así que el profesor se las lleva a la enfermería.

---¡Es una gripe muy contagiosa!---grita un estudiante.---¿Alguien más aquí está enfermo? Salga si es así.

Antes de que alguien diga algo, estornudo y todos me miran.

---¡Ha-ri está infectada!---grita Se Hyeong y todos se alejan de mi moviendo sus sillas, exepto Jin Hwan, Cha Heon y Dae-Sung.

---Señorita, ¿Estás bien?---me giro lentamente y niego con la cabeza.---¿No estás enferma o si?

---No, claro que no.---respondo, yo soy muy fuerte en cuanto a enfermedades, pero otro estornudo me hace sentirme peor.

---No estás bien. Vamos. Te llevaré a la enfermería.---asiento y me levanto, por qué no me siento de la mejor manera.

El me deja en la puerta y el señor Lee le dice que se retire, ya que puede ser contagioso.

---Avisame cualquier cosa, estaré cerca.---es lo que dice Dae-Sung para después cerrar la puerta y entonces el señor Lee comienza a revisarme.

---¿Y Su Jin?---le pregunto por la otra chica que también vino a enfermería.

---Su condición empeoró y se fue al hospital.---me informa y eso me alarma.---Tu solamente tienes una fiebre. Debes descansar, te traeré algo de medicamentos para la fiebre.

Agradezco y me voy a acostar a una de las camillas en la cual, aún lado está Hee-Ji.

Después de media hora, por las bocinas se informa que todos deben ir a casa exepto nosotras, ya que estamos en cuarentena.

---Señorita.---escucho una voz por la puerta y veo a Dae-Sung asomado ahí junto a Jin Hwan, Ha Yeong y Sol-i.---Vine a verte, ¿Estás mejor?

---Mucho mejor, gracias.---le respondo honestamente.---Pero deberían irse, nos vemos después, o los van a regañar.

Ellos asienten y se despiden moviendo la mano y después se marchan.

Solamente me vuelvo a acostar en la camilla, espero sentirme mejor...

Meses después, 12 de diciembre.

---¿Que están haciendo?---les pregunto a mi hermana y a Ha Yeong, quienes están habilitados en secreto.

---Planeamos regalos para fin de año.---me contesta Ha Yeong mientras teje algo.---Dime, ¿Que le darás a Dae-Sung?

La mención de ese nombre me estremece, hace dos semanas casi que no lo veo, ha estado ocupado en sus entrenamientos.

---¿Tengo que darle algo?---pregunto a mi misma, ya que yo no doy regalos a menos que sea mi familia.

---Por supuesto, ahora son amigos.--me responde y yo solo me volteo nuevamente y pongo las manos en mi cara, pensando.

Estoy en mi momento de pensar y en eso alguien pone sus manos en mis ojos

---Adivina quien soy.---escucho esa voz dulce y a la vez varonil que me ha empezado a agradar bastante.

---¿Este es uno de esos juegos en los que tengo que mentir fingiendo no saber que eres tú, Dae-Sung?---al terminar mi hipótesis el quita sus manos y camina para estar frente a mi, su cabello está más largo

---Hola, señorita.---me saluda de forma amigable y en mi cuerpo siento un escalofrío al escucharlo

---Buenos días, alumnos. A sus asiento, por favor.---la maestra llega y todos van a sus lugares para comenzar.

Xxx

Mi hermana viene caminando más atrás con Cha Heon, ambos platican animados, mientras más adelante están Ha Yeong y Jin Hwan hablando igual y en medio, estoy yo y Dae-Sung.

---Tengo frío.---comento mientras frotó mis manos al frente.

---Ten, ponte esto.---miro unos guantes azules y grises en mi campo de visión.

---No hace falta...---el toma mi mano, su calidez manda otra corriente eléctrica a todo mi cuerpo y coloca sus guantes encima de mis manos.

---Tu los necesitas, además, no tengo frío.

Le sonrió y me pongo los guantes.

¿Por qué siento está corriente eléctrica cada que el me habla o toca?

¿Acaso morí electrocutada en mi vida pasada?

Continuamos caminando y en eso miro dos figuras de copos de nieve bordados en los guantes de Dae-Sung.

---Me encantaría que nevara está navidad.---digo mis pensamientos en voz alta y me doy cuenta tarde.---¿A quien no? ¿Cierto?---pregunto disimulamos.---Bueno, ya me tengo que ir.

Me apresuró a caminar rápido para llegar a casa...

Narrador omnicente

---Papa es increíble.---menciona Sol-i al ver a su padre tejer de manera rápida.

---¿Y a todo esto para que quieres una bufanda?---le pregunta Ha-ri mientras mira de manera sospechosa a su hermano.

---Para mi, por supuesto, ¿Para quien más?---se apresura a decir, ya que sus padres no saben de su gusto por Cha Heon.

---Bueno, así es como se hace.---comenta su papá mientras le entrega la bufanda empezada a su hija menor.

Mientras su madre recoje el cuarto de ambas, encuentra dos pequeñas cartas entre la libreta de su hija Sol-i, así que cautelosamente se las lleva

Ya en la cocina, su madre abre una y le da la segunda a su padre.

---¡Oh dios mío!---comenta su padre sorprendido, su papel es una confesión.---Esta dice: para mí querido amor... ¿Y la tuya?

---La mía dice: "Me gusta Ha-ri"---dice su madre.---¿Son cartas de nuestras hijas?

---¿Acaso alguien pretende a mis niñas?---esta vez habla su papá con tono temeroso.---¡No, no! Aún son pequeñas...

---¡Claro que no!---le tranquiliza su esposa, el solo se tapa la boca cuando ve a sus hijas pasar por enfrente de ambos, mientras su madre esconde las cartas.

---¿Todo bien?---pregunta la hija mayor.

---Todo bien, vayan a dormir.---les dice su padre y ambas se marchan mirando a sus padres de manera sospechosa.

---Tenemos que averiguar quiénes son...

Al día siguiente

Shin Ha-ri

---¿Que te parece?---me pregunta mi hermana enseñándome su intento de bufanda.

---Parece que la mordió un perro.---le dijo honestamente y ella baja su bufanda mientras su sonrisa se borra.---¿Por qué no solo compras una?

---Por que quiero hacerla yo misma. Es más que un regalo, es algo sentimental, pero tú no lo entiendes.---ella se da cuenta de lo que dijo.---Lo siento, no quize decir eso...

---Nos te preocupes, tienes razón, yo no entiendo nada de eso.---me levanto de mi asiento para caminar a la tienda.

¿Que le puedo regalar a Dae-Sung? Mañana es noche buena y ni siquiera lo siento.

¡Lo tengo!