Publica un capítulo y desaparece épicamente por varios meses.
Ups.
No, jaja, ahora si he vuelto.
ya un año de esta historia y la terminaré como era el reto. Un capítulo cada día. Tal vez sean más cortos ya que los últimos rondaban por los 7k, pero ya había advertido en un principio que no tenía una longitud establecida xd.Leí esto como 3 veces, pero si ven algún error, háganmelo saber.
ADVERTENCIA: Este capítulo incluye ENORMES, pero ENORMES spoilers del manga. En específico del arco de la fortaleza infinita y parte del final. No entro en muchos detalles y el resultado es diferente a lo que ocurrió en el manga. Sin embargo, algunas cosas no pueden cambiar.
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Kyojuro no sabe cuantas veces se ha lastimado así mismo para mantener la conciencia.
El sabor a hierro inunda su paladar mientras rastros de sangre bajan por su barbilla al morder su brazo izquierdo con fuerza bruta. Su propio brazo derecho ha sufrido el mismo destino.
El dolor se ha ido hace un buen tiempo.
El omega a su lado se ha dormido después de un largo forcejeo donde él resultó ganador. Hecho volita, Kyojuro lo ve temblando; tal vez de rabia, tal vez por efecto de su calor.
Pero por más que el omega le gruña y arañe para copular, Kyojuro no puede hacer eso. Aun cuando su parte más primitiva gana terreno para obligarlo a entrar en una rutina, aun recuerda su situación y las consecuencias que traería anudar a Tanjiro en este estado.
¿Pero, acaso no huele bien? ¿No quieres marcarlo?
Kyojuro muerde más fuerte.
El aroma lo hace salivar, aumenta la adrenalina y el ritmo de su corazón. Hay algo excitante entre el dolor que sufre y la esencia tan dulce del omega a su lado, cuyo aroma no hace más que intensificarse con el paso del tiempo. Llamándolo.
Antes de que pueda hacerle más daño a su brazo, deja de morder. Tiene que alejarse un poco de Tanjiro para disminuir las feromonas a su alrededor, llevando consigo una de las espadas para prevenir lo peor. No han aparecido más bestias ciegas desde que cubrió a Tanjiro con el hedor de una de ellas, teme que, ahora que su pareja es una bomba de feromonas, más bestias vengan a por ellos.
Por eso, cada vez que Tanjiro dormita, Kyojuro cambia su posición, adentrándose más en el laberinto y quedándose en lugares donde no puedan existir puntos ciegos para ver a las criaturas.
Pero todo tiene un límite, incluso él.
Aun cuando la adrenalina y el impulso de entrar a rutina lo mantienen atento y alerta, puede notar como su estado físico y mental se deteriora a un ritmo alarmante. Pelar con Tanjiro cada que despierta y posteriormente, tratar de calmar su llanto lo desmoraliza más de lo que puede llegar a admitir. Prometió no dañarlo, ser gentil. Y ahora mismo, no puede cumplir esas promesas cuando la única amenaza fuera de las bestias sea él.
Tanjiro nunca me perdonaría.
Sintiendo que ha podido descansar de las feromonas, se acerca más al omega. El aroma ya no es intenso ni las feromonas tan agresivas. Tanjiro ha entrado finalmente en su sueño profundo y Kyojuro no puede si no respirar aliviado mientras se derrumba a su lado.
Puede observar los rasguños y leves moretones que Tanjiro tiene en su cara junto a la suciedad, lágrimas y sangre seca. Así como una expresión leve de dolor y angustia.
Su pecho punza. Le duele verlo así. Quiere acercarse y acurrucarse contra él para disminuir su dolor, aliviar el calor que lo agobia. Su mano se posa suavemente contra la mejilla del omega. Observa atentamente como Tanjiro se relaja con un simple toque.
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Un mes para enamorarme, una vida para amarte.
FanfictionHecho para el #Omegacember Kyojuro no puede estar más agradecido por estar vivo, incluso si la recuperación es lenta y desesperante es mucho mejor que estar en un punto entre la vida y la muerte. El único problema, es que ahora hay algo muy profund...