Un mes para enamorarme, una vida para amarte.

Celo Omega

Adivinen quien volvió, perras!Aun no estoy muerto. Tuve problemas de salud, tuve una infección de oído, me enfermé del estomago, luego me intoxique por medicamento y por último me dio gripa.Tuve un pequeño bloqueo, pero aquí estamos.

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Ciertamente, cuando Kyojuro despierta y ve a Tanjiro a su lado de la cama provisional en la que lo han dejado, se anima. Su humor dura hasta que el dolor en su cabeza y los recuerdos de su enfrentamiento regresan como un balde agua fría. Entiende que Tanjiro solo está aquí para despedirse.

Kyojuro sabe que es muy probable que Tanjiro ya supiera sus emociones al respecto, pero eso no impide que el niño lo abrace con cariño y susurre cálidas palabras de despedida. Kyojuro lo abraza de regreso, aceptando que Tanjiro debe seguir avanzando y que no puede obligarlo a estancarlo en un solo lugar.

Porqué él es fuerte. Más fuerte que yo.

—Te cuidaras, ¿Verdad?

—¡Claro que sí! Sobreviví a los otros pilares, Gyomei y Giyuu no deberían ser tan diferente.

¿Será un mal momento para decirle que es lo que Gyomei los obliga a hacer? — Kyojuro piensa para sí mismo.

Nah, dejaré que lo averigüe el mismo.

Kyojuro sonríe tiernamente, ocultando su rostro contra en cuello de Tanjiro e inhalando con fuerza sobre la glándula aromática de Tanjiro, esperando con ansias el olor a pino, bosque y madera que ha estado queriendo oler de forma intima desde que Tanjiro llegó al campamento.

Para su confusión, solo llega a su nariz el olor a sudor y sal. No hay rastros de la esencia de su omega.

Kyojuro se separa lentamente, mirando de forma extraña a Tanjiro, quien parece un poco tenso. Quiere preguntar, quiere tener una respuesta. ¿Tendrá que ver con su celo que aún no se presenta?

Pero después de abusar de su poder para mantener a Tanjiro bajo su cuidado por cuatro semanas, se siente indigno de preguntarle. Invadir su privacidad. Si Tanjiro no le ha dicho, debe tener sus razones.

Cada uno tiene derecho a mantener secretos.

Kyojuro entonces solo deja salir un suspiro antes de sonreír levemente y revolver de forma cariñosa el cabello de Tanjiro.

—¿Me dejarías aromatizarte?

Si no puede olerlo, al menos hará que su propio aroma se quede pegado a Tanjiro por varios días.

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Kyojuro está sobre uno de sus subordinados, obligándolo a cargar su peso mientras hace lagartijas cuando el cuervo de Tanjiro viene directo hacia él. Kyojuro extiende su brazo, dejando que el cuervo se pose cómodamente.

—¡Animo! ¡Solo te faltan cincuenta lagartijas más! — Rengoku alza su voz de forma animada mientras acaricia la pequeña cabeza del cuervo.

—¡Apiádese de mí!

El cuervo juguetea un poco con sus plumas antes de hablar.

—¡KAW! Tanjiro me mando hace dos días para avisar que ha pasado con éxito la prueba del Pilar de la Roca! Te visitará pronto.

La noticia lo pone tan feliz, que se incluso se apiada del pequeño cazador debajo de él y se para. Dejando que el cazador caiga casi desfallecido al suelo.

—¡Continuaras tus lagartijas por la noche! — le advierte antes de irse.

Kyojuro va directo a los baños para limpiarse del sudor y la tierra que ha acumulado por unos días, lavando hasta el punto del enrojecimiento su piel y tallando con fuerza su cabello. Incluso su tiempo de vestirse es corto, teniendo un uniforme limpio y fresco en tiempo récord y lo único que le falta es cepillar su cabello con varios nudos.