Un mes para enamorarme, una vida para amarte.

Prendas con aroma

Me divertí mucho escribiendo esto!

Edit: Leí esto por segunda vez para ver weas raras, están corregidas todas creo, pero si ven más errores díganmelos para poder corregirlos. Probablemente, una vez que la obra este terminada me dedique a editar errores y narración extraña.

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Una vez que Tanjiro duerme, Kyojuro se pone manos a la obra.

Si bien no cumple todos los deseos del omega respecto al celo, sabe muy dentro de si que el muchacho se lo agradecerá cuando su calor termine.

Así que para matar el aburrimiento y hacer mientras algo productivo que no tenga que ver con sostener su espada. Kyojuro decide ir confeccionando el haori de Tanjiro.

Un haori desde cero, tal como le había regalado a Mitsuri cuando ella se convirtió en un pilar.

Su hermano fue muy amable al enviar su cesto donde tiene sus herramientas para hacerlo junto con una carta de la hermana de Tanjiro.

Aun puede recordar como la niña de negaba a vivir temporalmente en su finca. Kyojuro lo sugirió como un gesto de buena voluntad, un hogar temporal en lo que su hermano salía de su celo para que ella no se quedara tan sola ahora que sus números se habían reducido.

Eso y porque no podía mirarla a los ojos aún. Aún no podía mirar correctamente ni a los amigos de su amado.

Aun siente que les ha fallado.

Por eso se alegra que, a donde este ella, ellos la sigan para cuidarla.

La carta de Nezuko tiene una letra limpia, escrita meramente en hiragana y katakana lo que le saca una sonrisa. Puede recordar como su hermano al aprender a escribir, también hacía lo mismo.

La carta es animada, con Nezuko preguntando el estado de su hermano y contando varias anécdotas sobre lo que ha sucedido en la finca. Desde concursos de comida entre Agatsuma y Hashibara, hasta un momento donde su padre tuvo que perseguir a ambos muchachos por haber arruinado una de sus prendas favoritas.

El contenido ciertamente lo alivia. Por lo que no pierde el tiempo para salir de la habitación y escribir una respuesta a la chica, contando como va su hermano y sobre lo que desea regalarle.

"Mi haori sobrevivió de alguna manera a la redada de mi campamento, pero el suyo no corrió con tanta suerte" escribió antes de firmar la carta y enviar a su cuervo para entregarla. Mirando como el cuervo desaparece entre en cielo, se pregunta si puede terminar a tiempo para cuando el celo de Tanjiro termine.

Respirando hondo y con un fuerte y decidido "Yosh", Kyojuro reanuda su trabajo.

Ayer cuando terminó de mimar a Tanjiro pudo tomar sus medidas y en la noche pudo ir a comprar tela de un verde más oscuro al que usaba e hilos de diferentes tonos claros para bordar una bonita figura.

Agarrando la tela de verde oscuro, y una nota donde tiene las medidas correctas, empieza a delimitar las partes necesarias que cortará y unirá. Recuerda el proceso de cuando bordó el de Mitsuri, recuerda cuando su madre y su padre le enseñaron las técnicas para hacerlos. Como si fuera ayer donde aun era un niño y veía a su padre bordar flores rojas y naranjas para la ropa de su madre.

Kyojuro esta tan absorto en su trabajo y los recuerdos que no escucha varios pasitos que van hacía él y lo observan.

—No sabíamos que sabía confeccionar ropa, Rengoku — dice una de las niñas de Kochou al ver que ha empezado a cortar.

Kyojuro sale se su ensoñación, consciente de que las tres niñas lo miran con curiosidad.

—Mi padre me enseño — dice orgulloso —, mi madre me enseño la técnica para cortar la ropa y unirla, mi padre me enseñó a bordarla.