Capítulo 3

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Ya había pasado un año de la muerte de Paola, Manuel y Ana ahora estaban más unidos, ella seguía yendo a trabajar con su papá los sábado y en la semana panchita la cuidaba en lo que su papá llegaba de trabajar.

Manuel: Ana, hija ya llegue.

Ana: papá que bueno que llegaste... Terminé mi tarea a tiempo... ¿Si vamos a ir a la feria como me prometiste verdad? .

Manuel: Claro hija, me cambió y nos vamos... Te parece si cenamos pizza??

Ana: siii... Feria y pizza - dijo la niña emocionada.

Pasaron toda la tarde en la feria, Ana había estado de lo más contenta se subió a toda clase de juego, se ganó un peluche en los juegos de disparar al pato pero lo mejor es que entro a la casa de terror y no se asustó mucho.

Manuel: Hija es el último juego, que ya hay que ir a cenar anda vamos.

Ana: enserio!!.. Bueno que ese sea el último - salio corriendo de lo emocionada  que no se fijo y chocó con alguien.

Ana: Auchh!!... Estas bien, perdón no te vi.

Mirando a la niña que seguía tirada en el suelo con sus ojos llenos de lágrimas.

Niña: mami.. Me duele

Ana: oye disculpame enserio... No llores anda que tienes unos ojos muy bonitos.. Mira tengo este chocolate si quieres te lo doy para que dejes de llorar... Anda siii- dijo sonriendo.

Niña: esta bien, gracias- dijo levantándose y secando sus lágrimas

Ana: yo soy Ana tú ¿como te llamas?

Niña: me llamo Alejandra

Ana: que bonito nombre también tienes unos ojos muy bonitos-no podía evitar mirarla.

Manuel: Ana hija ya es hora de irnos despidete de tu nueva amiga. -dijo su padre a la distancia.

La pequeña Ana le dijo adios a Alejandra y se fue caminando rumbo a su padre sin dejar de voltear, a lo lejos vio que la mamá de la niña se acercaba a ella. 

Ya en la pizzeria Ana estaba platicandole todo lo que pasó con la niña y le decía que jamás había visto a alguien tan bonita...siempre pensaría en ella

Esperaba algun día... Ver de nuevo a Ale la niña bonita.

Manuel: hija termina de cenar, que hay que regresar a casa para ir a descansar....Ana te estoy hablando en ¿que tanto piensas?

Ana: en qué me divertí mucho...y que me hubiera gustado cochar con la niña cuando llegamos - dijo mordiendo su rebanada de pizza.

Manuel: que... ¿Porque lo dices? - dijo curioso.

Ana: bueno porque así hubiera tenido con quien subirme a los juegos que tu no podías por ser grande.

Manuel: jaja entonces me hubieras dejado solo... Escucha mi corazón hizo cruac se rompió.

Ana: no es cierto yo no escuche nada... No seas mentiroso papí ademas yo nunca te cambiaría por nada ni por nadie, recuerda somos, tu, yo y mamá que esta aquí en nuestro corazón.

Manuel: así mi amor, estaba bromeando por mi encantado que conozcas gente nueva... Creo que hoy ambos conocimos a alguien.- dijo suspirando.

Ana: tu... ¿A quien conociste papí?

Manuel: no me hagas caso y terminemos de cenar porque mañana tenemos que ir a trabajar.

Ana: pero panchita siempre me deja ver un poco de televisión antes de dormir.

Manuel: te va a crecer la nariz de Pinocho... Si ya me dijo panchita que te haces la dormida y cuando ella se va acostar prendes la televisión hasta quedarte dormida... Así que no trates de chamaquearme bebé que no naci ayer.

Ana: ashh esta bien al menos lo intente dijo sonriendo.

Antes de dormir Ana pidió que un deseo que pronto volviera a ver a Alejandra ya que no podía dejar de pensar en ella.

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Tal vez en pocos días haga otra historia o tal vez esta sea la única..... Tal vez

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