Capítulo 10

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Al despertarse Ana se dio cuenta que ya debían de estar en la fábrica, lo único bueno de dormirse es que la asistente de su padre estaba en la cama aún con ella eso significa que aún tiene una ligera ventaja sobre Ale, al menos eso era lo que ella pensaba. Ahora solo tenía que despertar a Vera para decirle que no comentara nada de lo que paso y menos que por su culpa llegó tarde, ya que si su padre se entera le restará más puntos.

Ana: hey... Vera despierta que ya es tarde... Anda no querrás que el señor Melgar te llame la atención.

Vera: dejame dormir otro ratito todavía no recuperó mi energía.

Ana: lo sé bebé pero anda no hagas esperar más a tu jefe... Apurate y prometo que en cuanto vaya a la oficina te llevo el desayuno - dijo rozando sus dedos con la piel de la chica.

Vera: y si mejor me reportó enferma y pasamos todo el día aquí las dos.

Ana: uff me encantaría pero sabes es que necesito que me ayudes con algo... No te conté pero mi padre nos puso a competir a Ale y a mí, y necesito el número de Industria Pimentel y conseguir una cita con ellos antes de que Alejandra lo haga y así llegar a un acuerdo con ellos y Ganarle a Ale...ándale ayudame y no comentes con nadie que pasamos la noche juntas ya sabes como se pone mi padre, no entiende lo que es sexo sin compromiso  - dijo besandola y acariciendola

Vera: ya sabes que cuando me tocas de esa forma no puedo negarte nada - dijo subiendose ahorcada ella

Ana: lo se, pero no te puedes negar que la ayuda que me das es muy bien recompensada - dijo dejando besos en su cuello y masajeando los pechos de Vera que era su punto débil, sabía que excitada no podría negarse.

Vera: está bien, te ayudaré - dijo antes de besarla apasionadamente

Después de darse una ducha juntas Vera y Ana ambas salieron de la casa de la asistente, vera directo a la fábrica y Ana se fue a su casa a cambiarse, no quería que su padre la viera con la ropa de ayer.

Mientras tanto Alejandra en la fábrica estaba cumpliendo con su primer objetivo ya que Sebastián cumplió con lo que pidió y antes de llegar a su oficina, el ya le había proporcionado los datos de la asistente del director de industria Pimentel. 

Alejandra había acordado una cita en los Angeles, el día lunes a la 1 pm ya que el director acaba de viajar otra cita de negocios y después de cerrar el trato se tomaría una vacaciones y no podría atenderlos hasta dentro de dos meses así que no le quedaba otra opción de ir y reunirse con él.

Una vez agendada  la cita Alejandra se relajo y le marcó a Sebastián para fuera a su oficina y así ponerse de acuerdo para la cita que le debía.

Sebastián: Ale ¿puedo pasar?

Ale: Claro que sí

Sebastián: ¿como te fue?... Te sirvió la información

Ale: si demasiado ya tengo la cita agendada, muchas gracias por ayudarme.

Sebastián: me alegro que consiguieras lo que necesitabas, ya sabes si necesitas algo no dudes en pedírmelo.

Ale: gracias, te pedí que vinieras porque se que te debo una cita.

Sebastián: no creas que te ayude solo por eso, sabes que puedes contar conmigo y si no quieres no es necesario que salgas conmigo - dijo apenado.

Ale: se que eres un caballero, pero de todas formas acepto salir contigo, me encantaría.

Sebastián: enserio... Te parece si nos vemos hoy en la plaza del centro y platicamos un rato o vemos una película lo que tu prefieras - dijo emocionado el chico.

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