Capítulo 17

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A la mañana siguiente la primera en despertar fue Ana, estaba tan cómodo abrazando a Alejandra que pensaba que era un sueño, cuando reaccionó que estaba en el hotel y en la cama, empezó a sacar el brazo con cuidado debajo de la cabeza de Ale y soltó su cintura, luego la observó por unos minutos dormida, pensó que si Ale era hermosa siempre pero dormida parecía un ángel.

Ana: Vamos Ana, no hagas ruido. - dijo saliendo lentamente de la cama y acomodando las cosas en el suelo para simular que durmió ahí.

Alejandra sintió cuando Ana sr levantó de la cama, imagino que quizás estaba en el baño pero cuando se sentó en el colchón, vio a Ana acostada en el suelo.. Fingiendo estar dormida y que se desperto por la alarma de que sonó.

Ale: Buenos días - dijo estirando el cuerpo.

Ana: Buenos días, aww mi pobre espalda. - fingió al quejarse.

Ale: ¿Que tienes Ana?

Ana: pues como no quería ser encajosa contigo cuando te dormiste te pase en la cama y me acosté en el suelo, no sabes de la que te salve de que pasaras una pésima noche.

Ale ¿Tan mal dormiste?.

Ana: Huy si no tienes ni idea, me duele tanto la espalda.

Ale: gracias por evitarme ese sufrimiento y cederme la cama. - le dijo aguantandose la risa porque sabía que Ana durmió en la cama, ya que sintió cuando se levantó.

Ana: de nada Ale, aunque si quieres puedes agradecerme con un masaje en mi espalda. - le sonrió conquetamente.

Ale: así, quieres un masaje... Ven.

Ana: ¿enserio me vas a dar un masaje? - se levantó con un poco de duda.

Ale: claro...tu siéntate aquí. - le dijo levantándose de la cama y vio como Ana se acosto boca abajo.

Ana: OK...espero que sea bueno.

Ale: toma - dijo sentándose aún lado de ella.

Ana: ¿Que es esto? - preguntó curiosa.

Ale: es una reservacion en un spa cerca del hotel para que te den el masaje que necesitas - le sonrió.

Ana: es neta, yo pensé.. Bueno yo - esta reservacion ¿la habías hecho para tí?

Ale: si, pero no importa, tu lo necesitas más que yo.

Ana: no ve tu, toma Ale-le devolvió la reservacion - es que yo pensé que tú me querías dar el masaje por eso quería uno pero no pasa nada si no tengo un masaje.

Ale: yo, he estados en muchos cursos o clases pero jamás fui a uno en que me enseñe a dar masajes. - le respondió apenada.

Ana: bueno no esperaba un masaje de una profesional pero si uno que te pueda relajar un poco, si quieres yo te puedo dar el masaje y así vez que no es muy difícil utilizar las manos para relajar el cuerpo. - Ana se reprochó por eso de querer enseñarle a dar un masaje, bueno de todas formas no creo que Ale acepte pensó.-

Ale: tu me quieres enseñar a dar masajes e incluso me detrás uno a mí

Ana: si, claro solo si tu quieres.

Ale: mmm... Bueno por que no -  Ale aceptó no sabia si era la mejor decisión pero quería acercarse más a Ana - aceptó tu clase con masaje incluido.

Ana: perfecto, ven entonces acuéstate. - le dijo Ana nerviosa.

Ale: no pero no ahora, aún tenemos que arreglarnos, mejor en la noche cuando regresemos. - le dijo emocionada.

Ana: OK... Como tu digas pero no se vale arrepentirse.

Ale: Bueno, se supone que ya vamos a llevarnos bien, no tengo porque arrepentirme.

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