Al siguiente día su cocina estaba llena de chicos hambrientos; como su heladera de alcohol. Le encantaba ver su casa así, además eran muy curiosos, sabían escuchar sus teorías y experiencias dando sus opiniones abiertamente, creando interesantes conversaciones. Eran sus invitados ideales para ese momento de su vida.
En la piscina, el equipo de mejores nadadores procuró enseñarle a Minho, pero resultó siendo un sketch acuático. Los otros bailaban en el pasto el cuarteto que sonaba de fondo, intentando cantar palabras en español, siempre random, era lo que más le atraía de ellos, su espontánea gracia.
Llegando el mediodía el trío se puso manos a la obra. Minho deseaba besarla cuando la veía concentrada midiendo algún ingrediente, pero solo podía tocarla disimuladamente; mientras tanto Jisung se acercaba a ella más de la cuenta, tocándola por cualquier cosa, llamando su atención sin disimulo, provocando que sus pulsos se disparen. Ella jamás había tenido complejo con la edad, sabía que era cuestión de vibras y no tanto de lo físico; toda relación era importante para nutrir su alma en su breve paso por la tierra. Pero cuando su hijo salió de su estudio musical la miró desaprobando todo.
—Buen día hijo, ellos son mis amigos, ¿querés comer con nosotros?
—No, si vas a jugar a la niñera, deberías pasar vergüenza sin público.
—¡Tayel!
Anna Luz señaló un cuadro, él apenas le echo un ojo y luego miró a su madre acobardado.
—Perdón, ¿podemos hablar de esto luego?
—Si cielo, más tarde lo hablamos.
Él se encerró en su dormitorio, sin siquiera mirar a los chicos; Minho apoyó su mano sobre la de Anna que estaba sobre la mesada y la acarició, siendo el único que había entendido la conversación y quién conocía sus historias a fondo. Pero la preocupación por cómo se estaría sintiendo su chica lo hizo olvidar de un importante detalle; sus amigos miraban alucinados sus manos unidas. Anna le sonrió amablemente y quitó su mano suavemente.
—Bien, disculpen esta escena; ya está todo listo, llevemos la comida a la galería exterior.
—Creo que preparamos poca comida... ¿qué haremos?
—Habrá que eliminar gente.
—Ha, Minho calla, no hará falta, mi heladera siempre tiene refuerzos.
—Nuna, no sé qué sucedió antes, pero podemos irnos si algo incomoda a tu hijo, no nos ofendemos.
—Te agradezco Yongbok, pero no te preocupes, él es así de asocial con todos y en todo momento; no tiene filtro, dice lo que se le viene a la mente sin medir las consecuencias. Si le llevo el apunte estaríamos completamente solos, deprimidos o furiosos.
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A COLORFUL FAIRYTALE (Stray Kids fanfic)
Fanfiction🌈 AMANDO A TODO COLOR - «Minsung y alguien más» Ella vive una fantástica historia de amor en lo onírico, enamorándose de un artista del Kpop quien está enamorado de otro hombre en la vida real. Sumérgete en sus sueños atravesando límites energ...