Rey del Bosque

X

- ¿Sanemi?  - llamó la chica.

- ¡S-Si! - eso sí lo sorprendió, la quería evitar justamente pero ahí estaba, la primera que se había levantado.

- Te despertaste muy temprano ¿no? - dejo su té - ¿A que horas llegaste ayer?  ¿No te dije que no salieras de este círculo?  - señaló el círculo dibujado en toda la carpa.

- No soy un niño, no necesito una estúpida niñera. - dijo apartando la mirada, y llendose de ese lugar, la verdad lo que necesitaba era un par de cadenas y ser encadenada, había cometido una locura, un pecado, una idiotez, estaba loco.

Se sentó en el trozo de corteza que estaba a un lado, ya estaba un poco lejos, suspiro tapándose el rostro para luego cubrirse el rostro.

- ¡Mierda! - se peino los cabellos, mirando su mano. Estaba loco, era un loco, había echo la peor locura, cerró los ojos y nuevamente esa imagen apareció torturando lo, era la peor locura que había  echo... la mas rica locura que no se arrepentiá. Trago duro al ver su entrepierna. - Es enserio...

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- Mm~  - se levantó con rapidez sintiendo el dolor en sus caderas, sus mejillas se ruborizaron al recordar más somenos lo de la noche anterior. 

- Hey, pareces como si hayas visto un fantasma. - se burló el pelirosa que estaba a un lado.

- Tú, yo estuve... como... - miro a todos lados, si había ocurrido eso como es que estaba ahí... y como su amigo no le decía nada, ¿acaso no había pasado? 

- ¿Qué? ¿Soñaste algo? - ladeo la cabeza.

- Soñe...- posiblemente si, ¿sólo había sido un sueño? - Aclaza ¿A que horas llegaste ayer? -pregunto levantándose sintiendo el dolor en sus caderas.

- Emmm pues temprano... - se rasco la nuca, la verdad es que toda la noche la pasó con su ¿pareja? Si así la podría llamar.

- mñn okey.. - suspiro y se estiró tal vez si había sido un ¿sueño?... un extraño sueño.

- ¿Por que la pregunta? - ladeo su rostro y se acercó.

- No... tuve un extraño sueño... Emmm algo con ese pilar blanco.... - dijo todo sonrrojado.

El pelirosa le tomo un par de segundos saber a qué se refería luego fruncio el entrecejo.

- Mm, deberías taparte esas marcas que aun te quedan de esa noche. - El echo que posiblemente su amigo era pareja destinada de ese wey le molestaba, aunque era normal que su amigo tuviera esa clase de sueños más en ese tiempo que estaba en su etapa de celo, con mayor razón tenía ese olor tan dulce como si acabará de "aparearse" como el menor lo decía.

- Eso es incomodó, además parecen marcas de pelea... - acaricio una que tenía en el cuello pero sólo el podía sentir ya que su cabello se lo cubría.

- Lo bueno es que no haz entrado en tu definitivo celo si no ya estuvieras marcado. - río el peligrosa.

- ¿Marcado? - ladeo su rostro.

- Si es como si ya fueras suyo, sólo órdenes de el obedecerias. - sonrió.

-¿¡Qué!? - alzó la voz un poco.

- No te preocupes eso no te pasará ya que no... bueno no has tenido relaciones con el... ósea como tu lo dices "apareado". - aclaró teniendo al de hebras azules pensativo. 

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Había pasado una semana, parecía una eternidad para el de hebras azules pero la chica insecto ahora era quién se quedaba toda esa semana con él.