flechadisimo - julián x enzo.

chamuyero

Julián, Enzo y Dybala estaban ya fuera del club, suponían que el bardo había terminado. De todos los años que había estado Álvarez en el club jamás había pasado algo así. Julián sentía que tenía que hablar bastante con Enzo así que le iba a proponer algo.

–eu enzo, estas todo matado, vení a mi casa que te voy a curar esos moretones y heridas.– dijo medio nervioso. –bueno, espero que no me dejes tirado por ahí, sos medio raro vos.– dijo el morocho refiriéndose a lo que había ocurrido el día anterior.

–bueeeno, mepa que yo ya me voyyy.– dijo Dybala. Enzo y Julián no se sacaban la mirada de encima, los dos estaban re embobados, y definitivamente Dybala estaba de más en ese momento. –chau pau, después nos vemos.– dijo Julián.

La casa de Juli no estaba tan lejos, solo que era vago para caminar. Pero hoy quiso ir caminando para que el viaje se hiciera un poquito más lento y estar más tiempo con Enzo. –amigo, que onda con paredes? no me respondiste.– que insistente estaba con ese tema, pensó Julián. –nada enzo, no pasa nada con él.– dijo mientras miraba el piso. Ni el mismo Enzo sabía por qué le importaba tanto la relación entre Paredes y Álvarez.

El camino fue incómodo para Julián. No sabía que debía decir ni que pensar, ¿por qué preguntaba tanto sobre el beso? ¿por qué lo acorraló en el club? ¿por qué sintió que si Licha no aparecía habría pasado otra cosa? Entre todos esos pensamientos se percató que ya habían llegado a su casa. –uh, colgué. ya llegamos enzo, esta es mi casa.– entraron a la casa, la mamá de Juli estaba en el trabajo así que la casa estaba solo para ellos, podrían charlar en paz, bueno, eso pensó.

–acomódate donde quieras enzo, ahora te traigo un vasito de agua y busco las cosas para desinfectar tus heridas.– enzo en vez de sentarse se puso a ver unos cuadros, se podían ver fotos de Julian de chiquito. Inconscientemente de un momento a otro estaba con una re sonrisa mientras veía las fotos, se le hacia tan lindo Julián, tan tierno.

Cuando Juli se acercó con las cosas pudo ver a Enzo mirando las fotos y sonriendo. Si ya le parecía lindo ahora creía que era lo más hermoso que había visto, pero enzo se percató de la presencia de Julian y al toque se sentó. –yo no estaba haciendo nada.– dijo haciéndose el desentendido. Julian rió y se sentó a su lado. –tu sonrisa es linda igual.– dijo y automáticamente se arrepintió de lo dicho, estaba súper colorado y el morocho le dedicó otra sonrisa matadora. Si, esa sonrisa te flechaba el corazón.

–acercate un poquito así puedo pasarte esto.– primero le puso un poquito de pomada en el cachete porque tenía un re moretón. –tus manos son re suavecitas, ¿sabías?– dijo Enzo, porque no mentía, era tan delicado con sus heridas. Además le encanta ver como se ponía colorado y nervioso. –callate, enzo.– dijo mientras ahora le ponía un poquito de agua oxigenada debajo del labio para poder desinfectarlo.

–callame vos, juli.– le tiró ese chamuyo, y el otro quedó helado. Se miraron por unos segundos y Enzo se acercó un poquito más, otra vez sus respiraciones chocaban y esta vez si se escuchaban los rápidos latidos del corazón de Julián. –como se nota que te vuelvo loco, eh.– y justo cuando casi pasó lo que Julián más deseaba, su vieja llegó a la casa. Álvarez tenía mala suerte.

Enzo rió, vio la desesperación de Julián y como fingía que nada había pasado. –hola ma, ¿cómo andas?– estaba nervioso. –hola mi bebé, ¿quién es este muchachito que está todo golpeado? ¿estás bien, corazón?– la mamá de Juli era un amor, pero Juli estaba avergonzadísimo. No sabía dónde meterse. –todo bien señora, no se preocupe. su lindo hijo me estaba curando las heridas.– Enzo lo hacía a propósito, quería poner nervioso a Juli.

Álvarez estaba colorado, evidentemente estando con Enzo no podía mantener la calma. La mamá de Juli estaba encantada con el morocho. –bueno chiquitos, los dejo tranquilos, me voy a hacer unas compras. cuando quieras estas más que invitado a comer, ¡te puedo preparar lo que quieras!– decía muy entusiasmada la mamá de Juli.

–créame que pronto me va a ver de nuevo por acá.– dijo con una sonrisa y Julián a punto de explotar de la vergüenza y cada vez más seguro de que le gustaba Enzo Fernández.

encara enzooo, ojo igual. no crean que va a ser tan fácil todooo, se vienen cosas buenas. 😼  espero que les esté gustando la historia<3

besoteees, se me cuidan.☆