August [Pierre Gasly] *En pausa*

04. incoming call; drama

Hannah's POV.
Antibes, Francia.
Agosto 14, 2022.

La noche de ayer fue de las mejores de mi vida, Pierre se quedó en el apartamento conmigo.

Despues del primer beso vino otro y luego otro, y así sucesivamente, llegó un punto en que ambos creímos que nos quedaríamos sin aire.

Era la segunda noche que pasaba con él y definitivamente podría acostumbrarme a esto, a despertar y verlo dormido, ver la tranquilidad que tiene.

Al parecer se quedaría aquí un par de días, honestamente yo estaba maravillada con la noticia.

Desperté temprano con la rutina de siempre y cuando volví a casa él había hecho el desayuno.

Dios, no puede ser tan perfecto.

-Buenos días bonita.- Saludó mientras terminaba de entrar al departamento.

-Muy buenos días.- Sonreí y me acerque a él.- ¿Qué tal amaneciste?

-Mmm.- Pensó por un momento.- Bien, pero hubiera amanecido mejor si la bella mujer con quien dormí anoche hubiera despertado a mi lado.

-Lo siento guapo, te lo compensaré.- Dije tomándolo del cuello y acercándolo a mi.

-No me tortures más y bésame.- Murmuró el cerca de mis labios, a lo que yo obedecí.

No se como era posible, pero cada beso era mejor que el anterior.

Una vez separados ambos juntamos nuestras frentes y nos sonreímos, cada momento que pasaba con él no podía dejar de sonreír.

-Felices diez días de conocernos.- Dijo el y no pude evitar reír.

-De la manera más romántica y cliché posible.- Deposité un beso corto en sus labios.

-Es por eso que hoy estamos aquí, gracias a que tú me chocaste.- Rió suavemente mientras me abrazaba.

-Oh claro, por eso yo te envíe flores.- Reí con el.

-El desayuno está listo.- Cambió de tema y negué con la cabeza mientras reía.

Separamos el abrazo y mientras desayunábamos el me platicaba más sobre lo que él hacía en pista, se le iluminaban los ojos mientras me contaba sobre su trabajo, realmente le apasionaba.

Terminamos el desayuno y levantamos la mesa, el fue a darse un baño mientras yo terminaba de poner todo en orden.

Me encontraba lavando los trastes, tratando de recordar si ya no tenía pendientes, quería estar libre totalmente para los días en que Pierre estuviera aquí, quería mostrarle Antibes, comenzando por mañana.

Sentí una respiración en mi cuello y miré de reojo a Pierre, únicamente vi su rostro.

-Vaya, si que la gente cambia cuando se baña.- Reí un poco mientras terminaba de enjuagar la última cuchara.

Sequé mis manos con la toalla de cocina y me di vuelta, Pierre seguía parado ahí, sin camisa, únicamente con un jogger.

Santo Jesucristo, este hombre tenía unos abdominales divinos, no puede haber hombre más sexy en la tierra.

Al parecer lo miré más de lo que creí.

-¿Disfrutas la vista Miller?- Sonrió mientras me tomaba por la cintura y me acercaba a él.

-Créeme, la disfruto.- Sonreí yo esta vez.- Gracias al señor por otorgarme el sentido de la vista.- Junte ambas manos y miré hacia el techo.

El rió ante mi gesto mientras negaba con la cabeza.- Eres un caso aparte Hannah.- Dijo para después besarme.