Ya estoy tumbada en la cama, lista para dormirme, pero respondo con un "pasa" después de que hayan tocado a la puerta.
-Te voy a explicar todo. -Dice mi hermana sentándose a mi lado.
-¿Todo el que?
-Para empezar, he hablado con Pedri. Me ha dicho que te puedes quedar en su casa sin problema. -Asiento con la cabeza. -Para darle la sorpresa a Gavi, irás a Alicante. Pero vas a ir con el hermano de Pedri.
-Tata que no lo conozco de nada. -No me gusta esa idea, si no me cae bien será un viaje demasiado incómodo.
-Pero si seguro os hacéis amigos, ya verás. -Hace una pequeña pausa y luego sigue con su discurso. -Te presentas en el partido con una cartulina grande para que te vea. La harás en el hotel antes de ir, por cierto. Dormís en el mismo hotel que los futbolistas, así que seguramente te pongan con Gavi.
Yo sonrío, estoy tan contenta de poder ver a Pablo después de un mes, un mes que se a hecho eterno.
-Y más o menos eso, seguramente no nos veamos porque yo estaré entrenando, pero cuando pueda me paso por casa de Pedri.
Después de que Sira me diga todo esto, ella se va a su habitación y yo ya me pongo a dormir, hay que levantarnos sobre las seis de la mañana y no es plan dormirme tarde.
[...]
Al fin aterrizamos en Barcelona, ahora Sira va a coger un taxi para ir a su hotel, y yo otro para ir a casa de Pedri.
-Cuando pueda me pasaré por allí. -Sira me da un beso en la frente y comienzo a irme al ver que mi taxi está esperándome.
Alzo mi mano y la sacudo en forma de despedida, a lo que ella corresponde lanzando un beso al aire.
Me encuentro en la puerta de casa de Pedri, así que toco el timbre nerviosa y espero con ansias la apertura de la puerta.
-Pero bueno enana. -El hermano menor de los canarios me abraza y yo sonrío.
-Vaya cara de sobao' colega. -Digo riendo.
-Entra anda, que hace frío. -Pedri agarra la maleta que llevo y entramos dentro.
En el sofá hay un chico sentado, intuyo que es el hermano de Pedri, así que en cuanto me ve se levanta para saludarme.
-Buenos días. -Le sonrío.
-Buenas. -Él pasa a darme dos besos que yo correspondo amablemente.
-Candela. -Sonrío de nuevo.
-Yo Fernando.
Después de estar un rato hablando con ellos, Pedri me a dejado entrar en la habitación en la que pasaré estos días para colocar mis cosas.
-Seguramente venga Gavi en cuanto se entere de que estás aquí, así que te dejo la cama de matrimonio. Por cierto, yo me voy a vestir que tengo entrenamiento de puertas abiertas. -Clava su mirada en la maleta y piensa unos segundos.
-A ver que se le a ocurrido ahora. -Pongo mis manos en mi cadera en forma de jarra y el sonríe.
-Que soy un desgraciado. Faltan dos días para el partido, ¿por qué no vienes al entrenamiento? Ayer compré la cartulina y tengo por ahí bolis de colores. Hazle la pancarta y así ya estás hoy con él y no tienes que esperar dos días.
Mi cara debe estar digna de enmarcar. Tengo unas ganas terribles de chillar y ponerme a correr por toda la casa.
-Venga, vístete mientras yo hago eso.
Él asiente y en cuanto me trae las cosas llamo a Sira, la cual me lo coge al momento. Le cuento rápidamente que voy a ver ya a Pablo y ella también se a alegrado un montón, lo que me ha tenido que colgar y no he podido hablar más con ella.
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Un simple mundial • PABLO GAVIRA
Fiksi PenggemarPablo y Candela, dos adolescentes. Dos niños que se amaban, pero no sabían que era el amor, ni las consecuencias que llevaría enamorarse.