Capitulo 1.

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Todo suele cambiar, sea para bien o para mal.Después de nuestra última visita a Narnia, semanas después viajamos a América.Al inicio, podría decirse que todo iba bien, pero me dolía aún cada que lo veía.Busqué otro lugar, lo mejor para mi salud mental y también para mí misma, poder superar todo esto que pasó y volver a Inglaterra, con el profesor Kirke.

Realicé nuevamente mi viaje de casi 20 días en barco, la primera cosa que hice al llegar a con el profesor Kirke fue informarme sobre la universidad y de un posible empleo, quería mantener mi mente lo más ocupada posible.

Al comienzo, el contacto con mi familia era muy constante pero, con el pasar de los meses, el contacto con mi familia fue disminuyendo a solo dos cartas cada mes. Antes solían escribirme todos ellos, pero ahora solo me escribía con Caleb, y era el que me mantenía informado, mi madre y padre solo saludaban y pedían que me cuidara, Laila y Ethan no me escribían.

Sobre los Pevensie, no sabía tanto. A Lucy le enviaba una carta cada 2 meses donde le contaba cómo iban las cosas aquí y ella solo me contaba cómo le iba a en la escuela, muy pocas veces me contó sobre Peter y Susan (y esas veces, yo era la que preguntaba).

Creí que no había un motivo para estar bien o que mi situación podía empeorar, y a pesar de que quería tener mi mente ocupada, solo pensaba negativamente. Ya habían pasado 3 años desde nuestra última ida a Narnia.

Eustace había vuelto hace tan solo un año, e incluso poco después había ido a verlo, sorprendentemente era con quien hablaba más seguido, y que incluso solíamos vernos cada fin de mes junto a Jill Pole, su amiga.

Aún recuerdo cuando lo vi la primera vez, lo había ido a visitar de sorpresa a su escuela, me recibió muy alegre, pero rápidamente cambió su semblante, de camino a su casa, me contó sobre lo que había pasado con Caspian y sobre lo que había su aventura en Narnia. Me dolió enterarme sobre la muerte de Caspian, pero después de todo, sabía que nos habíamos podido reconciliar y eso me dejaba tranquila.

Suspire con pesadez al recordar eso, me puse frente de la ventana que unos años atrás los Pevensie y mis hermanos habían roto por jugar con la pelota.

Digory: Estás aquí. — Dijo caminando hasta mí mientras fumaba de su pipa.
- Sí, solo observo el paisaje.
Digory: Es lindo, te debe traer recuerdos. — Se puso a lado mío.
- Es precioso.
Digory: Dentro de un mes vendrán.
- ¿Quiénes?
Digory: Tus hermanos y los Pevensie, solo que se me había olvidado mencionártelo.
- ¿De verdad? - Dije feliz.
— ¡Estoy ansiosa por volverlos a ver! Ha pasado mucho tiempo.
Digory: La espera será corta a partir de ahora.
- Quisiera ver cuánto ha crecido Caleb. — Sonreí.
Digory: Ahora es todo un adulto, ¿no es así?
- Casi lo es, tiene 17 aún.

Sonreí de lado, la última vez que lo vi, fue cuando tenía 14 años recién cumplidos, ya debía de haber cambiado. 

 - Iré a mi habitación, tengo tarea por hacer.
Digory: Adelante. — Se hizo a un lado.
- Gracias.

Caminé hasta mi habitación, eran solo las 9 de la mañana en sábado, todavía tenía puesta mi pijama, comúnmente también tenía clases los sábados, pero las habían cancelado al igual que me habían dado el día en mi trabajo por la tormenta que iba a caer dentro de poco.Sonreí por el hecho de pensar que los volvería a ver a todos ellos, pero pensé en Susan y Ethan, ¿ellos también vendrían después de lo que pasó la última vez? Me dolió el hecho de creer que talvez ellos no vendrían, pero desde el fondo de mi corazón, deseaba volverlos a ver y más a Ethan.En ese momento, recordé lo poco que había hablado en las cartas con Lucy y las cartas que me enviaba Caleb.

Peter; Un joven apuesto de tan solo 22 años, quien cursaba con éxito la carrera de médico en una universidad en América, quien también tenía a varias chicas detrás de él, pero sin tomarles importancia, supuestamente estaba centrado solo en sus estudios para cuando terminara su carrera poder abrirle paso al amor.

Los Reyes De La Era De Oro IV (Edmund Pevensie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora