Sentía derretirme por fuera a causa del sol, y por dentro ante esas palabras y su mirada, esperando que me bese; pero él tomó mi mano para que me ponga de pie y me invitó a entrar a la casa. Cruzamos el comedor, pasamos la sala de estar y por último a otro ambiente, con ventanales hasta el piso que se encontraban abiertos, dejando pasar aire y luz, aún más acogedor y fresco. Libros, instrumentos de cuerdas, cuencos, almohadones en el piso y muchas velas, era precioso, ¿cómo es que ayer no lo vi?
Me pidió que me sentara en la alfombra, ambientó el momento con una música suave, ♪Nature Boy, de Jon Hassell; ya podía notar que nos llevaríamos muy bien musicalmente. Fue encendiendo cada una de las velas aromáticas, por último cerró un poco las cortinas, causando que todos mis sentidos comenzaran a despertarse.
Se sentó delante de mí casi rozando mis rodillas, tomó mis manos colocándolas sobre ellas y así nos quedamos, respirando juntos, recibiéndonos, sosteniendo nuestras miradas. Primero surgieron sonrisas, luego profundidad en sus ojos, el calor de nuestras manos trepaban por mis brazos, traspasando mi corazón, mi cuello, hasta mis labios, que se abrieron dejando escapar el aire, como queriendo librarse de algo, algo que no podía nombrar ni en mi cabeza. Él seguía en mi mirada con absoluta ternura y de repente, una oleada de lágrimas brotaron de mis ojos, me entregué a ese océano que corría por mis mejillas ardidas, con mi lengua probé una de ellas y sonreí, su sabor me recordó el mar, un mar y un cielo rosado, y una sensación de amor dulce que me envolvió. Respiraba hondo y exhalaba liberando cada vez un poco más de peso, de angustia, de exceso de pensamientos; mi cuerpo comenzó a relajarse tanto que cerré mis ojos y habité plenamente esa oportunidad conmigo misma.
Él fue soltando poco a poco mis manos, para ir subiendo por mis piernas y acercar mi cuerpo hasta subirlo al suyo. Entrelazados de pies a cabeza, nuestras energías se mezclaban, nuestros cuerpos se moldeaban, cada vez más cómodos, con más sosiego, estaba segura que ese era el lugar donde siempre estuvimos y donde siempre íbamos a estar. Mi mente ya no estaba activa, sus manos acariciaban delicadamente mi piel erizándola, sus labios tomaron mi cuello alternando besos con mordiscos, haciéndome estremecer.
Cuando nuestras frentes se encontraron, se tomaron una pausa provocando un cosquilleo en nuestro entrecejo, mi mente se llenó de imágenes vivas, sentía mi alma dividida en varias dimensiones, confundiendo la realidad. ¿Estaba en medio de una inmensa naturaleza paradisíaca, o estaba en la casa de León? Continuamos encendiéndonos en cada respiración, siguiendo lentamente el movimiento que nacía desde el interior de cada parte de nuestro cuerpo. El placer desbordaba, otra vez perdí la noción del tiempo, abrazados en ese mismo lugar, embriagados.
No hubo penetración, no hubo orgasmos, no fue necesario, solo presencia absoluta y una eléctrica conexión que colmó mi ser.
Por primera vez podía decir, que había hecho el amor.
Luego de ese apasionante tantra, de una exquisita comida y un juego de preguntas y respuestas que me fascinó, pero que me dejó más helada que nariz de zorrito ártico, comencé a sufrir una presión en mi cabeza y mucho cansancio; León me sugirió una ducha relajante y nos fuimos a dormir, desnudos y plenos. Llegando el amanecer desperté con mucho malestar corporal y lloré intensamente como una niña, él me contuvo y me recordó que quizás estaba experimentando una etapa de sanación, así que descargue todo lo que sentía sin preocuparme, ya que conocía perfectamente cómo funcionaba mi cuerpo, reconocí esos síntomas y su causa, sabía que iba por buen camino, por ahora quedaba agradecer y descansar, dejando que la naturaleza haga lo mejor que sabe hacer, traer equilibrio. Lo abracé fuerte y pasados unos minutos volví a dormirme profundamente.
Cuando abrí mis ojos ya había claridad y ahí estaba él, observándome, tapé su rostro con mi mano, él se rio de mi mueca gruñona; todavía sentía mucho sueño y dolor en mi cabeza, mis ojos cayeron pesados nuevamente.
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MY PINK STAR (Rowoon fanfic)
RomanceERES LUZ? ERES OSCURIDAD? 💫 Esta es la primera vida de Lyra en el planeta tierra, dónde se encuentra con un misterioso hombre, con quién en medio de tormentas y demonios internos, vivirán un cósmico amor. ¿Serán capaces de soportar sus diferencias...