Matrimonio concertado del CEO: La Arpía y el CEO.

Capítulo X El primer encuentro de los amantes secretos.

Mariam.

Varias secretarias de nueva contratación y yo, estábamos esperando para incorporarnos a nuestro puesto de trabajo, cuando se nos notificó la nueva normativa que la empresa, como empresa contratante, había asignado para poder obtener la clasificación relacionado con el puesto que cada una debíamos desempeñar, ya que se le atribuía el puesto, a pasar la prueba del instituto Lauren. Unas pruebas que Arianna y yo ya habíamos pasado en varias ocasiones en otros puestos de trabajo, ya que servía para saber el grado responsabilidad que podía asumir, en la escala empresarial, una secretaria en todos los departamentos de la empresa.

No me parecía mal pasar dicha prueba, ya que así, la asunción del puesto era más justa, de cuerdo a tus habilidades y capacidades.

Mientras escuchábamos por parte del representante de personal, la nueva política de contratación impuesta por la Dirección de la empresa, me imaginé que había sido mi marido quien encargado de hacerlo.

-"Bueno quizás era hora que el gran Kevin Junior Powell que descubra de lo que soy capaz de hacer. "- pensé.

Con este pensamiento me concentre en las indicaciones de cómo se iba a realizar la prueba, cuando en la sala entró una Barbie millonaria, vestida de Armani, de pies a cabeza. Aunque su expresión no era del todo feliz, parecía más bien furiosa.

-" ¿Quién está a cargo de esto?, quisiera saber quién es el incompetente que ha organizado estas pruebas estúpidas, da igual su resultado, he sido contratada por la madre del CEO para ser la nueva secretaria de Dirección, la secretaria personal, así ¿qué alguien me expliqué que está pasando aquí?"-al oír la explicación de la rubia una ira me inundó, la maldita de mi suegra ya había hecho su movimiento, no hacia ni un mes que su hijo y yo nos habíamos separado temporalmente y ya le estaba buscando una zorra que calentara su cama, siendo yo su esposa legal.

Con suegras así quien necesitaba enemigos, ya tenía el enemigo en casa. Pero si la señora Brenda Powell, se creía me iba a dejar vencer tan fácilmente es que no me conocía para nada.

Mientras que el responsable de contratación intentaba explicarle a la idiota mimada de la Barbie, que estas decisiones se habían tomado desde la presidencia. Pero la cabeza hueca exigía que ella fuera exenta, ya pasara lo que pasara ella seria la secretaria del CEO.

Me harté de tanta soberbia de la niña rica, y levantándome me enfrenté a ella, con mi característica personalidad, como diría Kevin, deje que la lengua arpía, saliera a pasear.

-" ¿Pero se puede saber quién te crees que eres niñata millonaria?, cuando el resto está aquí para optar a su puesto de trabajo, si tan unida estas a la madre del CEO, deberías saber que en las empresas Powell está prohibido adquirir un puesto de trabajo por amiguismo, si no quieren que el caso se lleve a la junta central y hasta el CEO pierda su puesto de trabajo, si has sido recomendada por tan alta personalidad de la empresa, será porque estas capacitada para pasar la prueba del instituto Lauren, como el resto de la secretaria, si no es favoritismo descarado, y ante eso, tanto el personal de la empresa que te contrate, como todos los cargos que acepten esa contratación, como el mismísimo CEO, tendrían que responder ante la junta central, y dimitir o ser despedido."- estaba tan concentrada poniendo a la idiota rubia en su sintió, que no me había dado cuenta que las cámaras de la sala estaban grabando la reunión, y en ese momento, el CEO responsable de las producciones Nacionales de Powell Holding, no se perdía nada de la reunión. Observaba, sonriendo, mientras veía como la histérica de la rubia de bote, pasaba por todos los colores, desde el rojo que da lugar a la ira, hasta el blanco total, al darse cuenta que debía pasar por la prueba si no quería que la junta echara al CEO, que ella venía a conquistar, por favorecer una contratación, por encima de las normas de la empresa, cosa que si hacía mi suegra, casi a diario.