Damned to hell || TK ||

13 : Sobrevivir

Jungkook sentía cómo el aire se le estaba acabando, se removía como podía y sus lágrimas de desesperación salían de sus mejillas. Sentía su fin en esos momentos y también mucho arrepentimiento por lo que había hecho, cuando creyó que ya no aguantaría más una risa macabra por parte de Taehyung se escuchó, sintiendo el agarre de su cuello aflojarse poco a poco. Tosiendo apenas, sintiendo como las sogas de sus muñecas eran aflojadas por un momento para ser remplazadas por unas esposas y las cadenas de sus pies fueron removidas.

—Eres un simple estúpido, pero por desgracia aún me debes muchas cosas princesita, así que tienes suerte de que aún no mate en este preciso momento.—Hablo Taehyung mientras negaba con su cabeza.

Un golpe en el rostro del menor cayó con bastante de fuerza, provocando que este se quejara y comenzara a sangrarle tanto la nariz con los labios. En lo que Taehyung sacaba su arma y le apuntaba el estómago. Haciendo que Jungkook comenzara a respirar agitadamente.

—Te daré una oportunidad más mocoso, pero intenta volver a escapar y aparecerás muerto en un basurero.—Taehyung hundió su arma con más fuerza en el vientre de Jungkook.—¿Te quedó claro hijo de puta?

Jungkook solo pudo asentir a lo dicho de Taehyung, ahogando un sollozo y siento levantado del suelo, donde el mayor le puso el arma en la cien, obligándolo a caminar. A lo que Jungkook sumisamente obedeció subiendo las escaleras y llegando al habitación en donde lo soltó por completo.

—¿Donde está Soobin?—Pregunto mientras sobaba sus muñecas.

—Está en el cuarto de allá.—Respondió de mala gana.—Ve a verlo, por que si empieza a llorar vamos a tener problemas.

Jungkook no dijo nada y solo fue directo a done el mayor le había dicho donde estaba el pequeño Soobin. Yendo a su cuna para poder tomarlo en sus brazos y mecerlo con cuidado.

—Aquí está papá, el te cuidará.—Beso la frente del infante, sentándose en la cama viendo como el pequeño hacía soniditos con su boquita.

Jungkook coloco con cuidado a Soobin en la cama y se coloco a su lado para abrazarlo mientras apretaba sus labios, quería llorar por la frustración que tenía al ver que su plan había fallado.

—Descansa bebé.—Susurro al ver como Soobin daba leves bostezos y este comenzó a cantarle con delicadeza.

Así fue como a los pocos minutos Soobin se quedó dormido profundamente, en eso Jungkook también a los segundos se quedó dormido junto al pequeño infante. Todo el mal rato que había pasado hace poco lo dejo estresado y muy cansado, por lo que no aguanto más. Pero luego de un rato, este sintió como lo movían con fuerza, haciendo que despertara a los segundos un tanto asustado. Viendo que era Taehyung, el cual le hizo una seña con su cabeza que se levantara. Obedeciendo por el miedo que le causaba y salieron de la habitación.

—¿Que se le ofrece señor?—Pregunto.

—Ve a hacer la cena, la servidumbre trabajo medio día así que ve.—Apuntó la cocina.

—Pero... Soobin esta solo en la habitación le puede pasar algo.—Hablo Jungkook un tanto preocupado.

—No me interesa Jeon, ve a hacer lo que te dije.

—Pues está primero mi bebé.—Dicho esto iba a ir de camino a las escaleras, pero un jalón de cabellos lo hizo retroceder.

Seguido de un golpe con fuerza en el rostro de Jungkook, haciendo que este soltara un gemido adolorido y volviendo a llorar por la fuerza que había ejercido.

—A mi no me vas a desobedecer mocoso de mierda.—Al ver a Jungkook en el suelo, pateo con fuerza su estómago.

Minutos después el llanto del bebé se escuchó desde arriba, haciendo que Taehyung rodará sus ojos fastidiando. Agarrando la cabellera de Jungkook y alzándolo para chocar ambas miradas.

—Mira lo que provocas.—Abofeteo con fuerza su mejilla izquierda.—Ve a hacer callar a ese niño y vienes a hacerme la puta cena.

Taehyung soltó a Jungkook con fuerza y este se levantó para correr a la habitación donde estaba Soobin, tomándolo en sus brazos para poder calmar su llanto. Lográndolo en un par de segundos, haciendo que nuevamente este se durmiera para así Jungkook dejarlo en su cuna con cuidado de que este no despertara. Una vez que termino con Soobin este bajo lo más rápido que pudo para ir directo a la cocina y preparar algo de cenar. Agarro unos ingredientes para poder preparar de cena bulgogi, ya que a este se le antojaba y lo cocinaba muy bien. No era el mejor chef, pero siempre solía cocina junto a su madre para tener la cena lista cuando su padre llegara del trabajo. De ahí aprendió a hacer ricos platillos y ayudaba a su madre cada vez que podía. Una vez que el arroz que también había preparado estaba listo, tomo un plato hondo para poner hay un poco separado del bulgogi, una vez listo todo fue hacia la mesa del comedor y dejo ambos platillos ahí, mientras ordenaba un poco la mesa para que el mayor comiera a gusto, sin tener ningún regaño de su parte. Taehyung, al ver que Jungkook había hecho la cena, fue a sentarse. Sintiendo el aroma de la comida, impregnarse en sus fosas nasales haciendo que este automáticamente cerrara sus ojos para disfrutar aquel olor.

—Sírvete tu también y de paso tráeme una botella de Soju.—Le hablo a Jungkook que estaba viendo con nervios su reacción.

Jungkook asintió y fue a servirse en un plato arroz y un poco de bulgogi que quedaba por ahí, llevo los plato a la mesa y rápidamente fue a buscar la botella de soju que el mayor le había pedido. Ya una vez ambos en la mesa, comenzaron a comer, en lo que Jungkook rezaba por que su comida fuera del gusto de Taehyung. Pues no quería recibir otro castigo o golpe de su parte.

—Eres bueno cocinando niño, está muy bueno esto.—Hablo Taehyung mientras metía las tiras de carne en su boca.

—Me alegra que le guste.

—Bueno, solo como aviso quiero que te vayas alistando para esta semana, nos vamos a mudar a Estados Unidos.

Jungkook, al escuchar esto, casi se ahoga con un trozo de carne. Tosiendo leve y bebiendo del vaso de agua que estaba a su lado para poder recuperarse, sin poder creer lo que había escuchado.

—Te lo digo para que estes preparado, en esta semana nos vamos.—Bebió del vaso que tenía soju.—Iremos de compras para llevar lo necesario para Soobin.

Jungkook solo asintió.

Luego de que ambos terminaran de cenar, el menor recogió la mesa y lavo los trastes. Aún no asimilaba que este se iba a ir a vivir a otro país, iba a tener que empezar todo de nuevo y no volvería a ver más a sus padres. Odiaba la idea de tener que olvidarse de ellos. Pero no le quedaba de otra más que aceptar y asimilarlo de una vez por todas, ahora debía mantener fuerzas por Soobin, que era el único que le preocupa.

—Hijo de puta.—Pensó.

Luego de que termino de lavar los platos para poder acomodarlos y subir a la habitación donde estaba Soobin, vio que este estaba dormido aún, haciendo sonidos con su boca. Al sentir la presencia de Jungkook, el infante se quedó mirándolo y Jungkook solo le dedicó una sonrisa.

—Te amo mi amor. Vamos a salir adelante, lo prometo.

Se acercó más a su cuna para acariciar la suave piel de Soobin, mientras unas pequeñas lágrimas comenzaba a salir de sus mejillas. Apretó sus labios, viendo como el pequeño movía sus piecitos y sonreía.