Damned to hell || TK ||

15 : Atrapado

El estómago de Jungkook rugía por el hambre que sentía en esos momentos y fue el motivo por el que se despertó, notando que aún estaba en el jet. Con la mirada intento buscar a Taehyung, el cual estaba hablando por teléfono con alguien. Se levantó sin importar fue donde él para ponerse a su lado, el mayor al darse cuenta le dio un empujón alejándolo de él. En lo que le tiraba una mirada amenazadora. Por lo que decidió irse nuevamente a su asiento esperando a que el mayor terminara de hablar por teléfono sintiéndose impaciente.

—Bien, ya estoy aquí.

Taehyung apareció a los minutos que este se había alejado de él, viéndolo de arriba hacia abajo. Haciendo al menor temblar un toque para luego este devolverle la mirada, chocando con la de él.

—Yo...—Se detuvo un momento.—Tengo hambre.

Taehyung rodó los ojos.

—Ve al final, ahí tiene una nevera con comida, puedes sacar lo que quieras. Ya no me molestes más Jeon.—Hablo fastidiado y retirándose de ahí.

Este solo hizo una reverencia y fue hacia el final, donde estaba una pequeña nevera y saco una botella de agua con unos snacks y tomó estos para empezar a comer, pues el hambre lo estaba invadiendo por completo.

—¿Y terminaste? Tengo que hablar de algo contigo.—Taehyung se sentó a su lado y Jungkook solo asintió dejando los snacks a un lado.—En unas horas más vamos a aterrizar y nos iremos a arreglar, debes acompañarme a una junta hoy.

Jungkook frunció el ceño.

Era raro que le pidiera ser su acompañante a una de sus juntas de trabajo, pues a su corta edad no pensó ir a una de ellas. Pero quiso obedecer y no discutirle, no quería más problemas con el pero si estaba muy nervioso ya que no sabía que era lo que debía hacer y temía equivocarse.

[...]

Luego de unas horas por fin aterrizaron, la niñera que estaba encargada de Soobin le entrego el pequeño a Jungkook, que este feliz lo tomo en sus brazos repartiendo besos en su suave carita. Con cuidado bajo del jet y ambos se dirigieron a un auto que los estaba esperando, los guardias subieron todo el equipaje. Soobin fue puesto en una silla de bebé y Jungkook se colocó el cinturón sentándose con alguno de los guardias atrás porque Taehyung se sentó frente al copiloto. Luego de un rato el auto se estacionó frente a una gran mansión, notando que esta era mucho más grande que la que estaba allá en Corea. Jungkook camino hasta la entrada viendo la lujosa mansión por dentro y sin duda era muy hermosa.

—Vamos a la habitación del niño.—Taehyung le hablo por detrás, haciendo una señal para que lo siguiera.—Es por aquí, vamos.

Jungkook lo siguió hasta las escaleras para poder subir estas junto a él, con cuidado ya que tenía a Soobin en sus brazos. Caminaron hasta el fondo en donde había una amplia y muy bien decorada habitación para Soobin.

—Ve a dejarlo a su cuna, ya nos tenemos que preparar. Así que va a darte una ducha.

—Si señor.—Jungkook camino hasta la cuna que estaba apegada a la pared y dejó al pequeño Soobin ahí.—Volveré en un rato más mi amor, descansa.

Dicho esto salió de la habitación y Taehyung lo llevo al baño, Jungkook solo espero que este saliera del baño para empezar a desnudarse y encender la regadera, para así poder meterse y dejar que el agua cayera en su cuerpo, mientras tomaba la esponja para poder pasarla por su cuerpo. Lavando de este por completo, para luego seguir con su castaña cabellera. Luego de terminar con su cabello, este apagó la regadera para salir con cuidado, tomando una toalla para poder secar su cuerpo y luego tomando otra para enrollarla en su cintura para poder salir y buscar a Taehyung que estaba en una habitación arreglándose mientras se miraba al espejo.

—Señor, ya estoy listo.—Murmuro un tanto tímido.—¿Que debo ponerme?—Arrugo su nariz mientras veía al mayor.

Taehyung se dio vuelta viendo al castaño de pies a cabeza, mordiendo sus labios disimulando al verlo de aquella manera. Su piel de porcelana que a pesar que habían unos cuantos moretones ahí, no dejaba de verse hermosa antes sus ojos.

Que ganas de follarme al hijo de puta.

Pensó, para luego entrar en la realidad y ir al armario en donde saco la ropa que tenía para Jungkook. Saco una blusa abotonada, unos pantalones de mezclilla negros y finalizando unos zapatos negros.

—Ahí tienes, en los cajones de allá está la ropa interior. Vístete rápido por que no soy alguien con mucha paciencia.

Dicho esto, Taehyung continuó arreglándose en lo que Jungkook iba a buscar un bóxer y sin sacarse la toalla del cuerpo se lo coloco. Para luego dejar la toalla a un lado y tomar los pantalones y se los coloco, notando que estos le quedaba un poco sueltos. Por lo que Taehyung lo noto y le lanzo un cinturón y este se lo coloco para que el pantalón quedara firme para así terminar de colocarse las demás prendas mientras la mirada del mayor estaba encima de él, lo que hacía que este se pusiera muy nervioso ante eso.

—Te queda muy bien hermoso.—Taehyung sonrió para acercarse a él.—Te vez muy formal y guapo.— Arreglo un poco los cabellos del menor y fue en busca de un saco del mismo color de su pantalón para acomodárselo al menor.—Ya estas listo Jeon, es hora de irnos.

Jungkook asintió y salió de la habitación detrás de él, en donde bajaron las escaleras y fueron a la salida en donde el chofer los esperaba. Ambos se subieron al auto y este se puso en marcha al lugar donde era su destino. Una vez que llegaron, Taehyung salió y Jungkook salió detrás de él. Ambos entraron al sitio, mientras que este abrazaba su brazo. Pues el mayor se lo había pedido antes de entrar, lo cual le parecía raro, pero aun así decidió hacerlo, llegaron a donde había un montón de hombres bien vestidos, unos venían con sus esposas y otros solos.

—Siéntate en el sofa.—Ordeno.

Jungkook asintió y fue a uno de los sofa que estaba por ahí, mientras mordía sus labios por los nervios que sentía por tanta gente. Más por que sentía la mirada de un hombre a lo lejos por lo que comenzó a mover sus dedos de los nervios, tenía un mal presentimiento. Algo iba a pasar ahí y iba a haber muchos problemas.