Avatar: aires de libertad (En Pausa)

7: Eywa una batalla en sangrentada

No entendía lo que estaba pasando pero cada paso que daba la llevaba a sentirse atraída por aquel árbol. El caminante de los sueños fue a dónde su hermana —wow, esto jamás había sucedido— dice Jake tocando los cabellos de su hermana quien estaba igual de sorpresa que él.

Neytiri se acercó a la chica junto a Eytukan, Tsu'tey y los demás líderes de los clanes. Quienes miraban abonados los cabellos y ojos de la humana.

—brilla con los colores del árbol de las almas— susurro Tsu'tey asombrado por el cabello de la más pequeña.

—no la toques— Mo'at quito la mano de Jake de los cabellos de la chica y empezó a inspeccionarla, Daikenys se sintió incomoda tras cada toque de la Tsahík —te dije que era ella— se dirigió a Eytukan. Dirigiéndose ante la humana que hora era parte del clan Mo'at hablo —ven conmigo Daikenys— pidió.

—¿A qué se refiere? ¿A qué se refiere con "era ella"?— pregunto confundida mientras caminaba a paso lento, siguiendo a Mo'at.

—a que tu mi niña— camino con ella agarrada de la mano hasta mostrarle a el gran árbol de las almas —eres la hija de Eywa—

Los ojos de Daikenys se abrieron con sorpresa con corta respiración se acercó a aquel árbol donde por alguna razón se sentía atraída, esa como si fuera hay donde perteneciera.

—pero...soy humana— dice en un susurro.

Mo'at se acerca a ella —pero todo indica a qué era la hija Eywa, por eso estás aquí Daikenys— la rodea para estar adelante de la chica —Eywa ya trajo de regreso a tu mundo, a el lugar al que perteneces, por eso tienes esos poderes mi niña, eres la hija de nuestra deidad, de Eywa—

—pero...— le da su atención a la Tsahík —¿Cómo?—

—del mismo modo del que tú cabello y poderes reaccionan al árbol de las almas— da un paso atrás abriendo los brazos mostrarle el hermoso camino de flores que dejaba con cada paso que daba —todo tu está reaccionando a su creadora, ven tienes que responder tus preguntas por tu misma—

Todos caminaron junto con ellas al árbol de la vida, cada paso era una plata nueva que nacía bajo sus pies y fue así como llego hasta aquel árbol.

Daikenys a paso lento acercó su mano el tronco del gran árbol el cual fue iluminado por una ola de viento en espiral que solo que sus hojas se alzarán y con ellos cayeran muchas semillas que volaron alrededor de Jake y Daikenys.

Daikenys, hija mía, que bueno el verte aquí..

—¿E-Eywa?— pregunto incrédula.

Entonces las Atokirinas volaron al frente de la chica y después una figura de una Na'vi se formó delante de ella hasta revelar a una mujer Na'vi adulta quien vestía un hermoso vestido hecho de paltas y semillas, su cabello tan largo y de color blanco.

Todos los Na'vis al verla se arrodillaron ante ella, esecto Daikenys y Jake que no habían salido del shock aún.

—si Daikenys, yo soy Eywa, tu madre— le dio una sonrisa, la sonrisa que solo una madre podía darle a sus hijos.

—no entiendo, ¿Por qué yo soy tu hija si soy humana?— pregunta con esa pregunta intacta en sus cabeza.

—por que hace 24 años atrás yo fui a su planeta y me hice pasar por uno de los suyos pero entonces paso lo más hermoso de mi vida, cometí el error más grande de mi existencia pero no me arrepiento de ellos por qué gracias ello te tuve a tu mi niña— le dice al paso que le acaricia una de sus mejillas —yo me enamore de un humano de un humano realmente único que me hizo ver más haya de lo que creí posible, pero este murió cuando yo intenté traerlo conmigo a Pandora pero tú mi hija estabas en mi sin que yo lo supiera aun— empezó a contra su historia con nostalgia —fue entonces cuando te di a luz pero sabía que no podía traerte aquí, no sin saber a cual tribu dejarte— mira a Jake quien la ve sorprendido —entonces lo conocí a él, cuando era niño pude ver el aura que tenía, era obvio que no pertenecía a ese mundo— le sonríe —si no al nuestro y así supe que estaría a salvo con su familia—