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Mi pulso estaba acelerado, trate de calmarme tomando un poco de agua y sentandome en el sofá. Debía hablarlo con alguien, pudiese ser con Mai pero ahorita estaría en sus clases de arte y no pienso interrumpirla, mi tía Mac llegaria en un rato así que subí a mi cuarto y no pude evitar ver por la ventana, ahora había otra luz encendida en la parte de abajo de la casa. Cerré la cortina y apague la luz de mi cuarto, me acosté y el sonido de mi celular hizo que me levantara asustada.

Un mensaje de Hendrix- Demonios había olvidado responderle. Le escribí que me parecía bien salir y quedó en buscarme a las 8, me quite los zapatos y me fui a bañar. El agua caía tibia sobre mi cuerpo y ya estaba totalmente relajada. Traté de no pensar en lo que había pasado y aunque se me hacía imposible logré concentrarme y escoger una ropa bonita para mi primera cita como novia de Hendix, de pronto esa sensación extraña había desaparecido y me estaba poniendo nerviosa cuando miré el reloj y faltaban 15 minutos para las 8.

Tomé mi bolsa y baje para tomar un poco más de agua. Por qué volvería, mi cabeza otra vez pensando en mi ahora nuevo vecino. No podía dejar de pensar en el momento en que abrió la puerta y me cai, ni en su cara relajada tendiendo su mano para ayudarme a levantar. -BUU!-

Maldición tía!- exclame dejando caer el vaso de cristal al suelo.

Oye y por que tan nerviosa?, estas esperando a alguien y por eso estas tan pensativa?- dijo escaneando mi atuendo.

Si voy a salir, Hendix debe de llegar en cualquier momento, pero no es por eso que estoy así- me gire para ver a mi tía y buscar la pala para recoger los vidrios.

Entonces, que es?

Recogí los vidrios y me pare en la puerta de la cocina Apoyándome del marco. Y cuando iba a contarle el timbre suena y vuelvo a dar un brinco de susto. - Yo abro debe de ser Hendrix- y me apresure a abrir.

Estaba demasiado guapo, perfecto y olía demasiado bien. Le Sonreí y me saludo tomando mi cara con ambas manos y dándome un beso en los labios.

Hola Hendrix- interrumpe mi tía detrás de nosotros.

Como esta Sra. Mackenzie?- pregunto dibujando una sonrisa.

Yo estaría mucho mejor si no me dices más señora, ok?- y mi tia me dio un beso en la mejilla y me dijo al oído que estaba guapo pero que igual no llegara tarde. No pude evitar poner los ojos en blanco ante su comentario e inmediatamente Hen y yo salimos de mi casa.

Cuando salimos de mi casa y nos montamos en su carro, trate de no mirar hacia la casa de enfrente pero fue imposible. Seguían las mismas luces encendidas y luego mire a Hendrix que me empezaba a preguntar a donde quería ir.

Podemos ir a MountsHall- le sugerí, Vancouf no estaba lleno de locales nocturnos pero ese era muy bueno, había buena música y su decoración tan punk de los 70 era genial.

Cuando me enderece y mire hacia delante, venía el, lo reconocí de inmediato y volví a mirar hacia Hendrix tratando de que no me viera.

Cuando llegamos a MountsHall el local estaba lleno para ser miércoles, nos ubicamos en una mesa a la mitad, las del fondo estaban ocupadas, y nos llego uno de los chicos preguntándonos que beberíamos o comeríamos, el pidió un sándwich de cordón bleu y salsa Alfredo y yo pedí una ensalada del chef, que no era mas que lechuga, cebollas salteadas, aguacate, queso de cabra, almendras y aderezo agridulce.

Por fin somos novios- logro decir luego de un corto silencio. Tenia una bonita sonrisa y su cabello corto lo hacia ver un poco mayor pero guapo.

Supongo que si- dije sonriendo un poco. El también sonrió y bebió un poco de agua de su vaso.

Sabes, no creí que me fueras a decir que sí, llevo tratando de invitarte a salir durante meses y ahora estamos aquí y tu ya eres mi novia oficial.

Oh por Dios! No puedo dejar de sonreír como tarada. No esperaba que me dijera esto, siento que va a notar que parezco una gelatina.

Pues yo tampoco esperaba que me pideras ser tu novia- pude decir tratando de parecer relajada.

En serio? Émily estoy loco por ti desde hace tiempo, y desde que entre al colegio siempre te he visto tan centrada en tus cosas, sin mirar a nadie, eres tu, y yo solo quería acercarme y temía que me rechazaras.

Ahora si, como carajos va a decirme esto y pretender que yo actúe normal, cuando no quiero ni siquiera mirarlo a los ojos porque va a notar que debo parecer un tomate. Mis manos están sudadas y yo no se que decir por Dios.

Por suerte llegó nuestro pedido y comenzamos a comer hablando de cosas del colegio y de a que universidad queremos ir. Así se pasaron las casi 3 horas que estuvimos ahí.

Caminamos hasta su carro y antes de montarnos me tomo de las manos y me atrajo hacia el, comenzó a besarme de manera suave y luego iba poniéndose más intenso, me tomó por la cintura y su lengua jugaba a la perfección con la mía, yo lo tomé por su cuello y poco a poco fuimos bajando nuestras ganas. Me dio un fugaz beso y nos montamos a su BMW negro.

Llegamos a mi casa y no dejo de decirme lo bien que la había pasado y lo mucho que le gustaba empezar a estar conmigo. Yo también estaba emocionada, el es tan encantador. Me baje del auto sin antes darle un beso, el esperó que yo entrara y se marchó.

12: 45 Émily Cooper, y mañana tienes clase- la voz de mi tía me exaltaba de nuevo y me giré para pedirle que no lo volviera hacer.

Quedaste en que me contarias algo, recuerdas?

Oh no por que tiene que dañarme la noche recordandome el encuentro que tuve con el asesino se Vancouf.

Cierto- le dije y me senté en el sofá. - sientate- y le di unos golpes al mueble.

Te escucho-

Bueno, que nuestro vecino volvió- solté sin más ni más.

Mi tía levantó las cejas y puso cara de confundida- Que vecino Eme?-

Pues el de al frente tía, el asesino, el de la espantosa historia de aquí.

Su cara cambió de expresión y se puso seria. - Quien te dijo eso? Como lo sabes?- espetó frunciendo el ceño.

Lo vi tía lo vi- y le conté todo lo que había pasado horas antes.

Y luego de regañarme por haber ido hasta allá término diciendo- Vamos a dormir eme, y de una vez te lo advierto no te quiero cerca de esa casa entendido?- y las dos subimos y nos fuimos a acostar.

La ventana estaba abierta, y el cuarto se veía vacío. No lograba vizualizar nada. Por más que intentará no podía dejar de mirar, y de la nada el pasó dentro del cuarto, di un paso hacia tras y volvía a sentir a mi corazón en la garganta. Estaba prácticamente inmóvil cuando el al agacharse a recoger algo que se le había caído miro hacia donde estaba yo, viéndolo como una loca paranoica, y yo termine lanzándome al piso y gateando hasta mi cama. Como si no fuese suficiente el haberme llegado hasta su casa y casi salir corriendo ahora me había pillado espiándolo.

Paranoia (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora